EL DUENDE
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Cuando esta tarde hemos llegado a la plaza de La Malagueta se nos ha informado de que habían cesado a los alguacilillos que operaban en la plaza de toros. El detonante, independientemente de lo que los periodistas escribimos ayer, muy a pesar de ciertos malaguitas que nos han acusado de ser los inductores del hecho, ha sido la petición unánime de las dos presidencias bajo firma a la empresa de ese cese, que lo ha aceptado sin condiciones, debido a los reiterados incumplimientos, desde ya hace varias temporadas, de las ordenes directas de los delegados de la autoridad, a quienes les deben obediencia. Como se comprenderá, y reitero el rechazo de la acusación de los malaguitas defensores de lo cutre y lo casposo, que en ningún momento fue la intención de quien les escribe y estoy seguro que del resto de compañeros, de que cesaran a nadie, pero lo que no se puede perder, ya que en el ruedo si se han perdido, son las maneras, la apariencia y la vergüenza, en este espectáculo. Ahora solo falta que corrijan a los profesionales de estar apoyados en la contera de la barrera como si estuvieran en la barra de un bar. Por otra parte decir que efectivamente hoy se han visto gestos de que quien manda en el callejón de la plaza es quien debe hacerlo, que no es otra que la autoridad, poniendo orden, y hasta incluso llamando la atención a un vendedor de refrescos que en frente del burladero de la segunda suerte, molestaba a los espectadores y sobre todo distraía al toro al que intentaban sujetar los banderilleros.
En realidad cuando se habla del duende se habla genéricamente y en abstracto de algo que sin definir afecta al espíritu e impulsa al cuerpo a realizar, en el caso del toreo, gestos mágicos que comunican con la gente, y que son capaces de crear obras de arte efímeras, si efímero es en si el arte del toreo, algo que se crea y se destruye en segundos y que por muchos vídeos y fotos que lo recojan jamás podrán explicarlo. Los grandes toreros de duende jamás supieron explicarlo a no ser con sus capotes o sus muletas. El Gallo, Albaicín, Pepín Martín Vázquez, Pepe Luis, Romero, Paula, etc. de manera que tal y como se ha desarrollado la corrida de hoy, quien ha estado bien de verdad ha sido El Duende, siempre en su sitio, ni una voz más alta que otra, bien colocado, con una educación exquisita y una torería inigualable. Sin gestos exagerados, siempre con la humildad que caracteriza a los toreros sobresalientes hasta dio un efectivo capotazo al quinto toro dejándolo en el sitio adecuado para continuar el tercio de banderillas. El Duende que por cierto se apoda así llamandose Simón Mijares, no por la gracia de Dios concedida, sino por su aspecto, si es que los duendes se parecen a algo conocido.
La verdad es que para fijarse en el sobresaliente la corrida no debió andar demasiado bien, y ciertamente que no porque incluso los dos toros de rejones que tenían desmochados los pitones, tenían más trapío que los de lidia ordinaria. A decir verdad el ultimo toro era chico pero era el más armónico de los cuatro. Cuatro que no fueron de la ganadería titular, sino remiendos de Gavira, corrida que por cierto ya se sabía el jueves día 12 que iba a ser lidiada en Málaga, con lo que el cachondeo de comprar toros con billete pequeño ya no significa un despiste de Puche en la primera temporada, sino una tomadura de pelo.
Lo más interesante de la tarde corrió a cargo del rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza que bordó el toreo a caballo con Chenel en la banderillas del primer toro, templando, toreando con la grupa y clavando al estribo, cambiando los viajes por dentro en terrenos arriesgados. En el cuarto se mostró serio con Silveti, menos efectista hasta que sacó para matar a Pirata un caballo tordo que desmontado Hermoso esperó junto al rejoneador que doblara el toro. Pirata ayudó en el último momento del hecho mordiendo en la penca del rabo.
En la lidia ordinaria Sebastián Castella anduvo toda la tarde tangado. Con el segundo no se puso en el sitio de embestir el toro y se acabó pronto y con el quinto comenzó con series por el pitón derecho aliviándose, para no romper por el pitón izquierdo y par destorear cuando volvió al derecho. En verdad cuando le ponían la muleta y se ponían en el lugar de torear, el toro iba, cuando se quitaba el toro protestaba.
Miguel Ángel Perera emocionó al personal en los pases cambiados donde se vio la fijeza del tercer toro pero naufragó en el toreo fundamental al natural pegando muletazos templados pero fuera de cacho, luego el arrimón final. Con el sexto no se llegó a acoplar y es que las puntas de los pitones, siendo un toro chico pero exigente, asustaban.
Los toros de Fermín Bohórquez para rejones correctamente presentados pero desmochados, el primero bueno pero a menos y el cuarto se rajó. Los de Gavira que sustituían a los de Torrealta, segundo anovillado con posibilidades, tercero novillo avacado que resultó muy bueno en la muleta, quinto también avacado pero sin cara que fue manejable y sexto chico pero armónico, manejable. Pitados segundo y sexto. Aplaudido primero y tercero.
¡Aquí paz y allí gloria!
FICHA:
Málaga, 20 de agosto de 2010. Otra bazofia!!
Dos toros para rejones de Bohórquez, bueno el primero, segundo rajado. Cuatro toros de Gavira mal presentados, muy bueno el tercero, resto manejables. Pablo Hermoso de Mendoza, pinchazo trasero y caído, pie a tierra, descabello, al tercio. Dos pinchazos, otro suelto, tres pinchazos más y uno trasero y caído, al tercio. Sebastian Castella, pinchazo perdiendo la muleta, seis pinchazos, uno hondo atravesado, aviso, silencio. Pinchazo hondo, aviso, seis descabellos desastrosos con el toro en los medios y de cualquier manera, silencio. Miguel Ángel Perera, pinchazo, aviso, dos pinchazos, trasera tendida atravesada, al tercio. Pinchazo en los bajos que lo degüella, silencio.
Gracias a Dios hoy no hay parte médico del doctor Luna.
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Cuando esta tarde hemos llegado a la plaza de La Malagueta se nos ha informado de que habían cesado a los alguacilillos que operaban en la plaza de toros. El detonante, independientemente de lo que los periodistas escribimos ayer, muy a pesar de ciertos malaguitas que nos han acusado de ser los inductores del hecho, ha sido la petición unánime de las dos presidencias bajo firma a la empresa de ese cese, que lo ha aceptado sin condiciones, debido a los reiterados incumplimientos, desde ya hace varias temporadas, de las ordenes directas de los delegados de la autoridad, a quienes les deben obediencia. Como se comprenderá, y reitero el rechazo de la acusación de los malaguitas defensores de lo cutre y lo casposo, que en ningún momento fue la intención de quien les escribe y estoy seguro que del resto de compañeros, de que cesaran a nadie, pero lo que no se puede perder, ya que en el ruedo si se han perdido, son las maneras, la apariencia y la vergüenza, en este espectáculo. Ahora solo falta que corrijan a los profesionales de estar apoyados en la contera de la barrera como si estuvieran en la barra de un bar. Por otra parte decir que efectivamente hoy se han visto gestos de que quien manda en el callejón de la plaza es quien debe hacerlo, que no es otra que la autoridad, poniendo orden, y hasta incluso llamando la atención a un vendedor de refrescos que en frente del burladero de la segunda suerte, molestaba a los espectadores y sobre todo distraía al toro al que intentaban sujetar los banderilleros.
En realidad cuando se habla del duende se habla genéricamente y en abstracto de algo que sin definir afecta al espíritu e impulsa al cuerpo a realizar, en el caso del toreo, gestos mágicos que comunican con la gente, y que son capaces de crear obras de arte efímeras, si efímero es en si el arte del toreo, algo que se crea y se destruye en segundos y que por muchos vídeos y fotos que lo recojan jamás podrán explicarlo. Los grandes toreros de duende jamás supieron explicarlo a no ser con sus capotes o sus muletas. El Gallo, Albaicín, Pepín Martín Vázquez, Pepe Luis, Romero, Paula, etc. de manera que tal y como se ha desarrollado la corrida de hoy, quien ha estado bien de verdad ha sido El Duende, siempre en su sitio, ni una voz más alta que otra, bien colocado, con una educación exquisita y una torería inigualable. Sin gestos exagerados, siempre con la humildad que caracteriza a los toreros sobresalientes hasta dio un efectivo capotazo al quinto toro dejándolo en el sitio adecuado para continuar el tercio de banderillas. El Duende que por cierto se apoda así llamandose Simón Mijares, no por la gracia de Dios concedida, sino por su aspecto, si es que los duendes se parecen a algo conocido.
La verdad es que para fijarse en el sobresaliente la corrida no debió andar demasiado bien, y ciertamente que no porque incluso los dos toros de rejones que tenían desmochados los pitones, tenían más trapío que los de lidia ordinaria. A decir verdad el ultimo toro era chico pero era el más armónico de los cuatro. Cuatro que no fueron de la ganadería titular, sino remiendos de Gavira, corrida que por cierto ya se sabía el jueves día 12 que iba a ser lidiada en Málaga, con lo que el cachondeo de comprar toros con billete pequeño ya no significa un despiste de Puche en la primera temporada, sino una tomadura de pelo.
Lo más interesante de la tarde corrió a cargo del rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza que bordó el toreo a caballo con Chenel en la banderillas del primer toro, templando, toreando con la grupa y clavando al estribo, cambiando los viajes por dentro en terrenos arriesgados. En el cuarto se mostró serio con Silveti, menos efectista hasta que sacó para matar a Pirata un caballo tordo que desmontado Hermoso esperó junto al rejoneador que doblara el toro. Pirata ayudó en el último momento del hecho mordiendo en la penca del rabo.
En la lidia ordinaria Sebastián Castella anduvo toda la tarde tangado. Con el segundo no se puso en el sitio de embestir el toro y se acabó pronto y con el quinto comenzó con series por el pitón derecho aliviándose, para no romper por el pitón izquierdo y par destorear cuando volvió al derecho. En verdad cuando le ponían la muleta y se ponían en el lugar de torear, el toro iba, cuando se quitaba el toro protestaba.
Miguel Ángel Perera emocionó al personal en los pases cambiados donde se vio la fijeza del tercer toro pero naufragó en el toreo fundamental al natural pegando muletazos templados pero fuera de cacho, luego el arrimón final. Con el sexto no se llegó a acoplar y es que las puntas de los pitones, siendo un toro chico pero exigente, asustaban.
Los toros de Fermín Bohórquez para rejones correctamente presentados pero desmochados, el primero bueno pero a menos y el cuarto se rajó. Los de Gavira que sustituían a los de Torrealta, segundo anovillado con posibilidades, tercero novillo avacado que resultó muy bueno en la muleta, quinto también avacado pero sin cara que fue manejable y sexto chico pero armónico, manejable. Pitados segundo y sexto. Aplaudido primero y tercero.
¡Aquí paz y allí gloria!
FICHA:
Málaga, 20 de agosto de 2010. Otra bazofia!!
Dos toros para rejones de Bohórquez, bueno el primero, segundo rajado. Cuatro toros de Gavira mal presentados, muy bueno el tercero, resto manejables. Pablo Hermoso de Mendoza, pinchazo trasero y caído, pie a tierra, descabello, al tercio. Dos pinchazos, otro suelto, tres pinchazos más y uno trasero y caído, al tercio. Sebastian Castella, pinchazo perdiendo la muleta, seis pinchazos, uno hondo atravesado, aviso, silencio. Pinchazo hondo, aviso, seis descabellos desastrosos con el toro en los medios y de cualquier manera, silencio. Miguel Ángel Perera, pinchazo, aviso, dos pinchazos, trasera tendida atravesada, al tercio. Pinchazo en los bajos que lo degüella, silencio.
Gracias a Dios hoy no hay parte médico del doctor Luna.
1 comentario:
Decía ayer Pepillo de Málaga que cuando él era jovencito, ya toreaba de novillero El Duende.
Pues así era, Simon Mijares tomó la alternativa en Ronda el año 1971 y ya no era un niño....
Saludos
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