Picador de Mariano Benlliure
LA BRAVURA
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Siempre que puedo me jacto de ser jiennense, de la tierra del
oro liquido, y del ganado bravo, pues es en esta provincia, mi provincia, donde
mas ganaderías de bravo se ubican.
Escribimos “bravo”, pues este termino calificativo, lo es, de
una especie bovina distinta, que a los aficionados nos enorgullece en especial,
por su belleza, trapío, acometividad y orgullo…además de ser única en todo el
universo conocido.
Y el concepto de bravura está en este siglo siendo modificado
por modismos evolutivos que se justifican porque la sociedad está en cambio. ¡Y
seguramente es así! Lo que pasa es que lo nuevo no significa que tenga que ser
mejor que lo antiguo, ni peor, claro. Solo es distinto.
Mi apreciado presidente de la plaza de toros de Sevilla,
Fernando Fernández-Figueroa Guerrero, a la sazón también novillero, y ahora
aficionado muy practicante, reflexionaba hace un mes sobre este tema en el blog
www.lostorosconagustinhervas.blogspot.com en un articulo que tituló: La
evolución de la bravura, concluyendo que esto está cambiando, y no se
manifiesta si a peor o a mejor.
Yo, si, me manifiesto. Cambia a peor, igual que cambia una
sociedad vulgarizada, (Chiquito de La Calzada, Chiquilicuatre, y los sistemas
educativos españoles que se han encargado de bajar el listón de la disciplina y
de la sabiduría)
Ver a un toro crecerse al castigo en varas es connatural al carácter español.
Embestir a la muleta como un borrego. No. Cambiar el criterio de selección de
los ganaderos por las embestidas a la muleta y no por las acometidas al caballo
es bajar el listón a los vagos (en educación) y a los toreros vulgares en la
tauromaquia.
El concepto de bravura esta evolucionando, cierto, pero lo
permitimos porque nuestra sociedad también permite que los vulgares ocupen
cargos importantes, y esto es ¿evolución?
En los tentaderos la muleta se valora igual o mas que las
varas. ¿Es esta la medida para hacer mejores ganaderías?
No es cierto que el comportamiento en la muleta sea bravura expresada de otra manera. Un toro es
bravo en el caballo y en la muleta es noble, colaborador, bueno. Aprobar con un cinco es lo mismo que aprobar
con cuatro y medio. Y sin embargo no es igual. En medio punto radica la
frontera entre la vulgaridad y la satisfacción del aprobado. Siendo el
aprobado, en mi criterio, otra forma de vulgaridad conformista.
Un toro que recibe 5 puyazos es más bravo que uno que enviste
15 minutos en la muleta, porque crecerse al castigo no es lo mismo que dejarse
llevar, que es lo que hacen la mayoría de los toreros actuales. Llevan, no
torean.
Y si, si encontramos un toro que se crezca al castigo en
cinco puyazos y embista por derecho durante 15 minutos eso es la perfección en
la bravura. Y digo yo. ¿No es el hombre a imagen de Dios? ¿Y Dios no es la
perfección? Pues está claro que el hombre y todo lo que el hombre toca debe procurar la perfección, que por cierto nada tiene que
ver con la vulgaridad.