El padre es muy buen aficionado, y fue gran torero. No recuerdo que ningún hijo de torero figura, haya sobrepasado al padre.
COMO UN AFICIONADO
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
El Capea torea como un aficionado. Es decir, "palante y patrás" cuando el toro va porque si el toro no va, el aficionado no sabe hacer nada, porque como es natural no entiende bien la técnica del toreo. El aficionado pone un poco de voluntad pero nada más. Se trata de eso. Pero en el toreo profesional de lo que se trata es de torear dominando y creando belleza, cuando se puede, pasándose por la faja los pitones. Pasarse por la faja los pitones no es otra cosa que pasarse seiscientos kilos de bravura, o algo parecido, por la barriga.
Que el capea no sabe torear, lo sabe la afición. Pega pases y se pone distante, porque no sabe ver los toros desde otra distancia. Además el hijo del Niño de la Capea, se quedó toreando tres, por cogida de Abellán. ¡Y ni por esas! Bueno pareció que en el que mató por Miguel estuvo bien, pero ¡qué va! Vulgar, despegado, con tandas muy cortas. No terminó de ver la embestida del toro, que fue el mejor, siempre yendo a más y el torero a menos. Porque ligó una serie por el pitón derecho y mató de una caída, le dieron una oreja. La segunda que se da en la feria, y aún más barata que la primera. Por supuesto, como no podía ser de otra manera, que en el sexto la devolvió porque con otro toro, este de su lote, que debió hacer quinto, manejable, estuvo a la deriva. El Capea cree que ya ha entrado en Madrid y me temo que lo que ha hecho es salirse más. Con su primero, otro que se dejó, anduvo como un principiante. El peor lote lo sorteó el toricantano David Mora, que ante dos toros difíciles, uno de ellos sobrero que fue el de su confirmación, estuvo muy valiente y decidido. Se pegó dos arrimones de pronóstico reservado y hasta le consintió tanto al sobrero que se corrió en quinto lugar por alteración del orden de salida a causa de la cogida de Abellán, que le cuajó varios naturales templados. Será bueno no perderle la pista a este torero.
Abellán con un marrajo estuvo porfión hasta que un pitón le alcanzó la zona superior de la corva izquierda que le mandó a la enfermería, andando, después de matarlo.
Los toros de Salvador Domecq correctos en su presentación. En quinto lugar se corrió un sobrero de Fernando Peña, bien presentado, descastado y peligroso. Primero, bronco y difícil. Segundo peligroso, no pasa. Tercero, se dejó. Cuarto aplaudido en el arrastre. Sexto manejable.
¡Aquí paz y allí gloria!
FICHA:
Las Ventas. Sábado 9 de Mayo. 3ª Feria de San Isidro. Toros de Salvador Domecq y uno, quinto, de Fernando Peña, correctos de presentación aunque desiguales en kilos. Tres complicados y tres manejables en distinto grado. Cuarto aplaudido en el arrastre. El sobrero, muy complicado. Miguel Abellán, dos pinchazos, contraria que soma y descabello, palmas. Pasó por su pie a la enfermería, ya no salió. El Capea, media trasera y dos descabellos, silencio. Estocada caída, oreja. Pinchazo, una contraria y atravesada y descabello, silencio. David Mora, que confirmaba alternativa, estocada trasera y caída, aviso, saludos. Estocada, palmitas.
Se desmonteró Félix Jesús Rodríguez tras banderillear al quinto.
COMO UN AFICIONADO
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
El Capea torea como un aficionado. Es decir, "palante y patrás" cuando el toro va porque si el toro no va, el aficionado no sabe hacer nada, porque como es natural no entiende bien la técnica del toreo. El aficionado pone un poco de voluntad pero nada más. Se trata de eso. Pero en el toreo profesional de lo que se trata es de torear dominando y creando belleza, cuando se puede, pasándose por la faja los pitones. Pasarse por la faja los pitones no es otra cosa que pasarse seiscientos kilos de bravura, o algo parecido, por la barriga.
Que el capea no sabe torear, lo sabe la afición. Pega pases y se pone distante, porque no sabe ver los toros desde otra distancia. Además el hijo del Niño de la Capea, se quedó toreando tres, por cogida de Abellán. ¡Y ni por esas! Bueno pareció que en el que mató por Miguel estuvo bien, pero ¡qué va! Vulgar, despegado, con tandas muy cortas. No terminó de ver la embestida del toro, que fue el mejor, siempre yendo a más y el torero a menos. Porque ligó una serie por el pitón derecho y mató de una caída, le dieron una oreja. La segunda que se da en la feria, y aún más barata que la primera. Por supuesto, como no podía ser de otra manera, que en el sexto la devolvió porque con otro toro, este de su lote, que debió hacer quinto, manejable, estuvo a la deriva. El Capea cree que ya ha entrado en Madrid y me temo que lo que ha hecho es salirse más. Con su primero, otro que se dejó, anduvo como un principiante. El peor lote lo sorteó el toricantano David Mora, que ante dos toros difíciles, uno de ellos sobrero que fue el de su confirmación, estuvo muy valiente y decidido. Se pegó dos arrimones de pronóstico reservado y hasta le consintió tanto al sobrero que se corrió en quinto lugar por alteración del orden de salida a causa de la cogida de Abellán, que le cuajó varios naturales templados. Será bueno no perderle la pista a este torero.
Abellán con un marrajo estuvo porfión hasta que un pitón le alcanzó la zona superior de la corva izquierda que le mandó a la enfermería, andando, después de matarlo.
Los toros de Salvador Domecq correctos en su presentación. En quinto lugar se corrió un sobrero de Fernando Peña, bien presentado, descastado y peligroso. Primero, bronco y difícil. Segundo peligroso, no pasa. Tercero, se dejó. Cuarto aplaudido en el arrastre. Sexto manejable.
¡Aquí paz y allí gloria!
FICHA:
Las Ventas. Sábado 9 de Mayo. 3ª Feria de San Isidro. Toros de Salvador Domecq y uno, quinto, de Fernando Peña, correctos de presentación aunque desiguales en kilos. Tres complicados y tres manejables en distinto grado. Cuarto aplaudido en el arrastre. El sobrero, muy complicado. Miguel Abellán, dos pinchazos, contraria que soma y descabello, palmas. Pasó por su pie a la enfermería, ya no salió. El Capea, media trasera y dos descabellos, silencio. Estocada caída, oreja. Pinchazo, una contraria y atravesada y descabello, silencio. David Mora, que confirmaba alternativa, estocada trasera y caída, aviso, saludos. Estocada, palmitas.
Se desmonteró Félix Jesús Rodríguez tras banderillear al quinto.
1 comentario:
De acuerdo que fue gran torero, aunque se ganó el título del rey del zapatillazo...
Saludos
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