LA CENA DE LOS HAMBRIENTOS

LA CENA DE LOS HAMBRIENTOS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Se supone que tenían hambre. Que venían a comerse el mundo. Y no. Era casi sabido lo que podía ocurrir, pero tal y como estaba saliendo la feria en cuestión de toros lo mismo daba que el cartel fuera el más malo de entre los malos que hay en la feria. Cosa que parece de fraude para el abonado, pero la disculpa de que en Madrid cabe todo, tapa bocas. Los empresarios lo saben, la Comunidad lo sabe. ¡Claro, en esta feria quien llena es el santo porque el cartel era para echarse a llorar!

Se suponían muchas cosas de los toreros y grandes dudas de los toros. Y en el análisis final, nunca más cierto lo de Pepe Moros. Muy propio de lo español. Buñuel trató el tema. Berlanga también. Invitar a un pobre hambriento a la mesa y encima que no le guste la comida. Que la desprecie, sacando el orgullo patrio, diciendo aquello de en mi hambre mando yo. ¡Pues tomad hambre chavales!

Es en estas corridas donde cabe la reflexión de lo que es Madrid o para lo que ha quedado Madrid. ¿Es Madrid una plaza para dar oportunidades? O ¿Es Madrid una plaza para demostrar cátedra? Un servidor es de la segunda opinión. A Madrid hay que venir sabiendo y a competir por ser el mejor. A Madrid no se puede venir con el hambre del que no sabe si mañana comerá porque la presión se lo come.

No debo por respeto a los que se han jugado la vida esta tarde, igual que todas, pero esta tarde en especial, porque han embestido los toros, cargar las tintas sobre los chavales. Han estado mal, y punto. Se han dejado ir tres cortijos, y punto. Ya no los van a ganar con el toro. Pero si debo destacar que de los seis toros han embestido cinco, aunque dos de ellos en menor tono, el quinto y el sexto, y que Los Bayones existe. Existe con toros descastados en los primeros tercios pero que para la muleta rompen, y qué forma de romper. ¿Verdad que sí Fermín? Fermín González y un servidor sabemos de ella. En Salamanca, y propiamente en Madrid se sabe de ellos. Lo que pasa es que la memoria falla, a ciertas edades.

¡Aquí paz y allí gloria!

FICHA:
San Isidro. Al ganadero le embisten los cuatro toros.
Se han lidiado cuatro toros de Los Bayones, correctos de presentación. El primero basto. Mansurrones en los primeros tercios pero que llegaron a la muleta con interés, los dos primeros y a menos, los dos últimos. Segundo aplaudido en el arrastre. Y dos remiendos de José Luis Pereda, tercero anovillado y malo, y cuarto terciado y feo pero bueno. Gabriel Picazo, media estocada perpendicular saliendo cogido sin consecuencias, (ovación que saluda). Pinchazo, aviso, caída y descabello, (al tercio con protestas). Emilio de Justo, aviso antes de entrar a matar, seis pinchazos con todo el cuerpo sin jugar el brazo, aviso, cinco pinchazos, tres descabellos, aviso y toro al corral, que se apuntilla en el ruedo. Silencio. Pinchazo, estocada y descabello, (silencio). Israel Lancho que brindó al doctor García Padrós en agradecimiento a su intervención tras la cogida del año pasado, pinchazo y metisaca, (silencio). Estocada, (silencio).
Al terminar el paseíllo hubo un minuto de silencio por la muerte de Joselito El Gallo. Y al romperlo, Madrid, sacó a saludar a Lancho. El pasado año casi pierde la vida en esta plaza.