RUIDO BRONQUIAL

Foto: El Juli baja la mano, por Pastor

MALAGA 07. JANDILLA, segundo bravucón. BUENAVISTA, quinto bravo. JESULÍN, al tercio en el lote. JULI, oreja y oreja con dos vueltas al ruedo. TEJELA, vuelta por su cuenta y al tercio.

RUIDO BRONQUIAL
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

El cuarto toro se asfixiaba. De su interior salía como un ruido bronquial que le provocaba media tos y que le condicionó todo el trasteo que Jesulín le imponía. Lo cierto es que el animal tenía voluntad de embestir, pero no terminaba de romper. El de Ubrique que se despedía del publico malacitano lo llevaba a media altura en un trasteo templado pero soso. Era la labor del típico enfermero pues el toro estaba enfermo. Metisaca, aviso y descabello. Mal con la espada, no mató, solo descabelló y por eso fue apercibido. En el que abría plaza el torero, en trance de retirada, significó sus mejores años del que todos conocimos como picolín de Ubrique, en su trasteo por la derecha que fue trasteo fundamental pues por el izquierdo no lo dejó ver. Una vez se la puso, una vez le echó la cara a los cielos y ya bastó. Como está de retirada, pide árnica al respetable y por consiguiente no quiere hacer los esfuerzos pertinentes para estar bien. Pinchazo y trasera caída.

El ruido bronquial del toro cuarto no fue el único que se oyó ayer en La Malagueta. A la presidenta Ana María Romero le dolerían los tímpanos del ruido bronquial que arrojaba el publico después de no concederle la segunda oreja al Juli. Hace bien Ana Mari. Esta plaza hay que valorarla y la única forma es con mano dura y firme ante el taurinismo imperante. Y si es de una mujer, mejor. Me dicen, yo no lo oí, que su hermano Juan Ramón, en una radio que pagamos todos los andaluces, dijo que debió darle al Juli esa oreja. En cosas de familia yo no me meto. El toro de la discordia, fue el quinto. Abrió la faena por bajo, bien. Luego con la derecha le tomó la velocidad en un par de series en los medios. Normal. Y cuando se echó la muleta a la izquierda vimos al toro, en bravo y al torero dominando aquello que se le venía pronto. La serie más buena por ese pitón y con una embestida fiera. A estas alturas el toro ganaba la partida. Cuando El Juli quiso darse cuenta de que la distancia del toro era la media, ya era tarde. Se había pasado toda la faena protestándole el animal y diciendole, es más allá. Y al final, con haber tenido emoción la cosa por el toro, se nos quedó la sensación de que El Juli no había cuajado a un toro bravo. Con una faena así, y una estocada corta y más baja que caída no se pueden dar dos orejas, y por más INRI, si Domínguez tuvo a la presidenta hasta las tres de la tarde erre que erre con los toros. En la segunda vuelta al ruedo la gente le gritaba ¡torero, torero! Después de esto habrá que ver si el facto político mantiene o no en el palco a Ana María. La mirada, que yo la vi, de su jefe, el presidente Pendón, fue matadora. En el torucho que hizo segundo siempre se quería ir y lo sujetó en los medios con un trincherazo que lo ahormó, luego dio una serie menos lucida por el derecho. Por el pitón izquierdo las series fueron más ajustadas y entregadas sujetando al bravucón. A la vuelta al pitón derecho lo entendió mejor y utilizó el recurso del pico por la colocación para ligar y forzar la embestida del toro. Sin lugar a dudas esta faena estuvo mejor construida que la segunda. Pinchazo trasero en la suerte contraria. Y en la natural estocada buena.

Matías Tejela no le cogió el aire al toro tercero, la muleta arriba, a media altura por el derecho y por el izquierdo sin bajar la mano, siempre acompañando, en series cortas y rematando el final con ayudados. Pinchazo en la querencia saliendo comprometido y bajonazo. Con el sexto se despistaba y el toro lo pillaba desprevenido, lo conduce a la voz y se queda descolocado y esto lleva a torear echando el toro afuera. Con la izquierda liga dos tandas y nada ajustado. Una actuación sin redondear. Estocada trasera y caída y un descabello.

La corrida de Jandilla con dos remiendos de Buenavista, lidiados en tercero y quinto lugar, desiguales de presentación. Segundo chico, cuarto terciado, quinto pobre de pitones. Primero bueno por el pitón derecho. Segundo bravucón. Tercero bueno que se raja. Cuarto noble pero enfermo. Quinto bravo. Sexto bueno. Al arrastre aplaudidos primero, segundo y sexto. Pitado el cuarto.
No se sabe bien cual es el motivo por el que los alguacilillos esperan a que salgan las cuadrillas en los medios y no en la segunda raya.

Antonio Caba lidió superior al primero.
El picador Nuñez fue ovacionado tras hacer lo propio al quinto.
La presidenta Ana María Romero estuvo importante. Manejó muy bien los tiempos del espectáculo. No concedió la segunda oreja al Juli. No se la merecía. Soportó estoicamente el griterío de "fuera, fuera" y las grandes broncas. ¡Así se forjan cueros!

¡Aquí paz y allí gloria!

REMATE, por Pastor.
Casi lleno en la Malagueta en tarde menos calurosa que la de ayer. En el burladero de la empresa Simón Casas junto a Puche, y más alejado Ricardo Gallardo, representante de la ganadería Fuente Ymbro. Lo que son las cosas, la corrida que vendría para Málaga se la lleva el francés a Nimes. He leído algunas crónicas de la corrida y he quedado atónito. Dos faenones del Juli, corrida bien presentada, con el toro de Málaga, desafortunada actuación de la presidenta... Pero lo que más me ha impactado es la calificación de robo que refleja el titular de mi compañero y admirado Carlos Crivell, en relación a la no concesión por la presidencia de la segunda oreja al Juli por su actuación en el segundo de su lote. Ese torete cornicorto (vean la fotografía) con cara de becerro, fue un animal bravo y codicioso al que Julián ni por asomo toreó como lo hizo con el mansurrón encastado que le toco en primer lugar con el que estuvo magistral, y sobre todo lo finiquitó de una estocada caída. Cualquier burel te puede pasaportar al otro mundo eso es muy cierto por eso respeto a todos los profesionales que están en el ruedo (eso sí admiro a muy pocos), pero la presentación de los toros es junto con la actuación de la presidencia esencial en la categoría de una plaza. Pues bien, la señora presidenta, Ana María Romero, durante toda la corrida ha estado acertada en los tiempos de la lidia, correctísima en el palco y nos consta que ha luchado lo indecible en los corrales, pues hasta cerca de las cinco de la tarde todavía había lío en esas dependencias ¿Qué queremos? ¿Que se aplique el reglamento? En ese caso, cuanto menos por la estocada la segunda oreja está totalmente injustificada ¿Que se aplique a unos sí y a otros no? ¿Que se valoren por igual faenas ante toros que ante perritoros? ¿Que se den orejas ante estocadas defectuosas?. Si hay un pero a la actuación de la presidenta ha sido en la presentación de una corrida terciada, anovillada con ejemplares indignos de una plaza de primera, por lo que para haber estado perfecta no debería haber permitido que semejantes animales hubieran sido enchiquerados. Por lo demás me quito el sombrero ante doña Ana Mª Romero y desde aquí le envió mi enhorabuena y mi reconocimiento como aficionado. Y disculpe a la masa por las injurias vertidas hacia su persona, pues no sabe lo que hace. Con el público que está acudiendo a la feria, la Malagueta no puede seguir siendo de primera. Pide el cambio de tercio con un solo puyazo, confunden presencia con juego del astado, pide música cuando aún no se ha iniciado el trasteo con la muleta (ya hablaremos del maestro Puyana), vocifera, insulta al palco, impone su falta de conocimiento y criterio a los aficionados, se lo traga todo... Es necesario la creación de una plataforma para solicitar que la Malagueta no sea plaza de primera, por dignidad y para no sentir más vergüenza ante el resto de la afición española, y sobre todo de nuestra hermana Sevilla. Nos tuvimos que quedar como plaza de segunda, que ni eso somos, y solo el capricho de algunos políticos, del director de espectáculos de la Junta de Andalucía y de los malaguitas de siempre, condujeron a tal despropósito.