ALMERIA 07. PALHA. Descastados que se dejaron. RUIZ MANUEL, oreja y al tercio. CHAVES, al tercio y oreja. CRUZ, al tercio en el lote.
COMO SUS TOROS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
El ganadero Joao Folqué es como sus toros. Aquí se tiene lo que se dice en el mudo ganadero, que al final, los animales son como los dueños. Se les imprime carácter, pasión, y esa mijita de mala uva que algunos tienen. Según su forma de ser así también serán sus toros. En la tertulia de la radio no ha dejado pie con cabeza en contra de los toreros, pegándoles arreones, a excepción de Cháves, al que ha puesto bien. Y ha dejado en un alto lugar a su corrida. Ha dicho que de seis cuatro. No se ha tapado, sus toros tampoco, ha pegado arreones de manso, embistiendo con la cara alta, sus toros igual, y se ha mostrado arrogante, como sus toros en el último tercio. ¡Ah! y lo más importante, cuando los toreros se han metido con ellos, se acobardan. Igual que el manso de Folqué. Que cuando me he metido con el, escurre el bulto. El ganadero portugués, no ha dejado títere con cabeza se ha metido con Fernando Cruz, que no ha sabido estar a la altura del toro sexto. Y con el torero de la tierra Ruiz Manuel, diciendo que el toro cuarto fue mejor que el torero. Después de decir alabanzas de bravura y vitoreando a López Cháves, que si ha dado la dimensión de lo que se esperaba de él. Le pregunté que si José Tomás le había pedido su camada.
.- Hombre no. - fue toda su respuesta –
Los toros desigualmente presentados. El primero muy terciado y el segundo muy chico. El sexto sin rematar. Todos mansearon en varas, cumpliendo el tercero y dejándose el sexto. El que no echaba la cara arriba es porque cortaba y el que no porque hacia hilo con los banderilleros. En la muleta bueno el primero. Manejable el segundo, quinto y sexto. Se dejó el tercero y se paró el cuarto.
Ruiz Manuel, dio buenos muletazos por el pitón derecho al primero, siendo los naturales los de mayor belleza. Mató de media trasera y atravesada. Con el cuarto las series más afortunadas fueron por el pitón derecho resultando de menor intensidad las series por naturales. Media baja.
López Cháves usó la voz para fijar la atención del toro en la muleta. Provocaba las embestidas, las recogía el torero y con ello conseguía ligar los muletazos. Por el pitón izquierdo solo dio una serie, el toro más quedo. Trasera baja. Con el quinto la apoteosis porque la consideración de manso que precedía al toro le ponían todas las cartas a favor del torero que supo aprovechar la mano para cuajarlo por la derecha, dandole dos tandas por la izquierda que supieron a Poco. Derroche de pundonor y entrega que es carta de naturaleza de este salmantino. Corta y trasera, dos descabellos.
Cruz no está bien con la espada. Se le fue el triunfo al sexto al que en realidad no lo mató, pues después de tres pinchazos y uno a recibir, descabelló y tengo dicho que eso no es matar a los toros. En este dio buenas series por el derecho bajando la mano y por el pitón izquierdo lo enjaretó también aunque se vino a menos el toro. Al tercero lo pasaportó de un pinchazo hondo, después de un trasteo aseado, en el que vimos cosas buenas por ambos pitones, más ligados, por el derecho, los muletazos.
¡Aquí paz y allí gloria!
COMO SUS TOROS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
El ganadero Joao Folqué es como sus toros. Aquí se tiene lo que se dice en el mudo ganadero, que al final, los animales son como los dueños. Se les imprime carácter, pasión, y esa mijita de mala uva que algunos tienen. Según su forma de ser así también serán sus toros. En la tertulia de la radio no ha dejado pie con cabeza en contra de los toreros, pegándoles arreones, a excepción de Cháves, al que ha puesto bien. Y ha dejado en un alto lugar a su corrida. Ha dicho que de seis cuatro. No se ha tapado, sus toros tampoco, ha pegado arreones de manso, embistiendo con la cara alta, sus toros igual, y se ha mostrado arrogante, como sus toros en el último tercio. ¡Ah! y lo más importante, cuando los toreros se han metido con ellos, se acobardan. Igual que el manso de Folqué. Que cuando me he metido con el, escurre el bulto. El ganadero portugués, no ha dejado títere con cabeza se ha metido con Fernando Cruz, que no ha sabido estar a la altura del toro sexto. Y con el torero de la tierra Ruiz Manuel, diciendo que el toro cuarto fue mejor que el torero. Después de decir alabanzas de bravura y vitoreando a López Cháves, que si ha dado la dimensión de lo que se esperaba de él. Le pregunté que si José Tomás le había pedido su camada.
.- Hombre no. - fue toda su respuesta –
Los toros desigualmente presentados. El primero muy terciado y el segundo muy chico. El sexto sin rematar. Todos mansearon en varas, cumpliendo el tercero y dejándose el sexto. El que no echaba la cara arriba es porque cortaba y el que no porque hacia hilo con los banderilleros. En la muleta bueno el primero. Manejable el segundo, quinto y sexto. Se dejó el tercero y se paró el cuarto.
Ruiz Manuel, dio buenos muletazos por el pitón derecho al primero, siendo los naturales los de mayor belleza. Mató de media trasera y atravesada. Con el cuarto las series más afortunadas fueron por el pitón derecho resultando de menor intensidad las series por naturales. Media baja.
López Cháves usó la voz para fijar la atención del toro en la muleta. Provocaba las embestidas, las recogía el torero y con ello conseguía ligar los muletazos. Por el pitón izquierdo solo dio una serie, el toro más quedo. Trasera baja. Con el quinto la apoteosis porque la consideración de manso que precedía al toro le ponían todas las cartas a favor del torero que supo aprovechar la mano para cuajarlo por la derecha, dandole dos tandas por la izquierda que supieron a Poco. Derroche de pundonor y entrega que es carta de naturaleza de este salmantino. Corta y trasera, dos descabellos.
Cruz no está bien con la espada. Se le fue el triunfo al sexto al que en realidad no lo mató, pues después de tres pinchazos y uno a recibir, descabelló y tengo dicho que eso no es matar a los toros. En este dio buenas series por el derecho bajando la mano y por el pitón izquierdo lo enjaretó también aunque se vino a menos el toro. Al tercero lo pasaportó de un pinchazo hondo, después de un trasteo aseado, en el que vimos cosas buenas por ambos pitones, más ligados, por el derecho, los muletazos.
¡Aquí paz y allí gloria!
2 comentarios:
Estoy completamente de acuerdo con todo lo escrito, yo estaba en la plaza y así lo vi. Los toros no valieron ni para hacer un guiso con los rabos. Corrida de toros baratera, engañabobos...
La Trinchera de Paracuellos hace ya años que no se molesta en ver estos toros portugueses.
Los toreros son como son, si hubieran estado en el 36, cuando les hubieran preguntado:
- ¿tu de quien eres?
ellos hubieran contestado:
-¡de los tuyos!
sin molestarse en saber quien era el que preguntaba.
Que aprovechen esas meriendas en 3º
Un saludo
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