20 agosto 2009

UNA CORRIDA DE SEGUNDA

El Fandi en una serpentina. Foto: Isabel Rodríguez

UNA CORRIDA DE SEGUNDA
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Decir que la corrida del Marqués ha sido una corrida de segunda es un piropo bastante amplio. En realidad de tercera, o si me apuran de segunda mala. Ni en los mejores años del Sexenio Ominoso, cuando José Carlos Escribano decía que no pagaba más de sesenta mil euros por una corrida de toros para Málaga, se habían aprobado semejantes animalejos. Cuatro cucarachas rubias y dos negras. De las rubias la primera regordía, la segunda chica, la sexta sin pitones. De las negras, la primera que hizo cuarta, anovillada y la quinta inválida. En general todas sin pitones. José Carlos desde su barrera se reía y con toda la razón, porque visto el ganado de presentación, hoy Puche lo ha hecho meritorio y como me tengo por justo, he de darle la enhorabuena a José Luis Martín Lorca, al que echo de menos porque a su cuenta y por mi pluma he echado buenas ferias.

Pero si los toros han sido de tercera o segunda baja, el publico se ha comportado como de regional tirando para plaza de carros. Pedirle una oreja al Fandi por cuatro pares de banderillas de aquella manera, por faena marrullera y espada pinchona, es de Catón taurino. Y lo más grave, que pudiendo no conceder la oreja, la presidenta la haya concedido. Lo que significa que en el palco no ejerce personalidad pedagógica.

Un servidor no quiere alimentar polémicas entre equipos veterinarios y gubernativos, pero de lo visto hasta ahora el equipo del nuevo presidente Del Olmo gana por seriedad y rigor. Es cierto que queda la mitad de la feria y aún hay cosas por ver... a resultas vamos.

Como la corrida ha resultado mala, la gente la ha tomado con Puyana, el director de la banda. Puyana no atacaba los pasodobles cuando la gente se los pedía y cuando lo hacia, otra gente le pedía silencio. En verdad el recurso para el aburrimiento hubiera sido la música con la que podíamos haber montado un baile para solaz del personal. Puyana con ese carácter de dictador musical que predomina sobre su afición, se negaba a tocar, y una voz guasona le rogaba al Fandi que le pidiera por ellos música a Puyana.

En todo esto estábamos cuando por el ruedo salían uno detrás de otro semovientes impresentables y descastados con los que los toreros se estrellaban y además querían estrellarse, pues el hecho de aceptar esta ganadería llevaba el premio incluido. No se recuerda triunfo importante en esta temporada del Marqués y sí de Los Recitales dónde se ve que fue a parar casi lo mejor de la herencia del autentico Marqués de Domecq.

Rivera Ordóñez puso banderillas al primero bastante aseado, sin concesiones, sobrio, al menos en los dos primeros pares. El tercero fue a la moviola saliendo desde el tercio del tres. Después en la muleta abrevió pues tuvo la mala suerte de que el toro perdiera las pezuñas interiores de las manos. Al cuarto le planteó un trasteo imposible pues el toro no llegó a romper.

El Fandi no entendió al segundo muy despegado en los cites y embroques. El toro era tardo pero cuando iba el torero le quitaba la muleta con lo que otra vez a empezar. Al final lo que hizo fue desgraciar a un toro potable. En banderillas los pares enfandilados, corriendo hacia atrás y clavando a pitón pasado, de dentro a fuera desde el estribo corriendo por el tercio y clavando en la raya de fuera y al violín por dentro. En el quinto puso cuatro pares, en realidad en estos tercios es dónde Puyana toca más seguido, el tercero más entonado. En la muleta otro trasteo inútil.

El sustituto de El Cordobés, fue El Capea, nada apreciado por el aficionado e indiferente para el publico, con lo que la devolución de entradas no llegó a las 600. El tirón de esta corrida es del Fandi. Y el hijo del Niño de la Capea no dio un muletazo limpio al tercero, y ciertamente debía ser imposible dárselos limpios, porque el toro calamocheaba bastante. La duda es si planteando el trasteo de otra manera le hubiera podido quitar ese defecto. En el sexto cosa parecida, un pacá y un pallá, con el agravante de que recibió una patada en el pecho que el animal le propinó cuando volviendo grupas, Capea le arreó un manotazo.

¡Aquí paz y allí gloria!

FICHA:
Sexta de abono. Málaga, 19 de agosto de 2009. Seis toros del Marqués de Domecq, mal presentados, el segundo chico, el cuarto novillo, bastantes sin pitones. Descastados. Buscando yugulares. Parados. Defendiéndose. Rivera Ordóñez, pinchazo sin soltar perdiendo la muleta y echando fuera del embroque y media tendida caída, silencio. Estocada caída, silencio. El Fandi, pinchazo perdiendo la muleta, del que sale condoliéndose del brazo izquierdo, y estocada, silencio. Pinchazo sin soltar, estocada trasera y dos descabellos, oreja. El Capea que sustituía al Cordobés, media caída, silencio y media echándose fuera de la suerte, silencio.

No hay comentarios: