Salvador Cortés. foto de archivo de Pastor
FUENTE YMBRO PONE CARA LA FERIA DE SEVILLA
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Salvo los dos toros terciados, tercero y cuarto, el resto han estado bien presentados, uno de ellos el quinto, ovacionado de salida, y dos ovacionados al arrastre, el primero y el sexto. La corrida de Ricardo Gallardo va a poner cara la feria de Sevilla, y eso que estamos como quien dice en los principios, pues hasta el día 29 quedan once corridas de toros y todavía las figuritas no han entrado en la feria.
No se pude decir que los toros hayan sido bravos en el caballo, casi todos han manseado, excepto el segundo y el quinto que se han dejado mejor. En general han galopado en banderillas y en la muleta ha habido tres toros de puerta grande, el primero, el quinto y el sexto, sobre todos, el sexto que para la muleta ha sido el más claro y entregado. En general, encastados, pero con un poquito de reserva porque a veces no eran muy continuos en las embestidas, punto principal por el que creo los toreros no han brillado, pues se quedaban desconcertados. Por ejemplo el primero se arranca de largo al cite de Cortés en los medios. Cuando llega se le advierte un calamocheo molestito. Hasta mediada la faena el toro no se entregó del todo por el pitón derecho. Por el izquierdo se quería ir, y “contri más” si el matador lo despedía con la muleta.
En realidad por ser una corrida exigente y los chavales nuevos, (Salvador Cortés no es nuevo, pero sus entendederas no dan para la veteranía), hubiera puesto a cavilar a más de una de esas figuritas que descargan la suerte e indultan toros.
Han triunfado cortando una oreja cada uno Nazaré y Esaú. Nazaré con el merecimiento de haberla cambiado por una cornada y Esaú por estar con corrección, a secas, en el sexto, pero sin cuajarlo. Este tuvo la valentía de irse a portagayola en los dos toros, y echarle muchas ganas. Se le ha visto más cuajadito y en el camino de torear de verdad. Aquel, sin suerte en el segundo de la tarde, un toro que por falta de fuerza se defendió y al trasteo la gente no le dio importancia, y en el del triunfo se equivocó al hacerle las cosas, confundiendo las embestidas regaladas con las encastadas y en una de ellas, por el izquierdo se lo llevó por delante. Que conste que por la cornada le dieron la oreja, que si no, la verdad del niño Jesús, es que el toro se le fue.
Lo de Salvador Cortés es de juzgado de guardia. A veces parece, y otras no parece. Que sabe torear, digo. A veces parece que tiene cabeza y otras no lo parece. En fin, que por su trayectoria, que debo decir ha sido bastante ardua (en Sevilla no, en Sevilla lo cuidan como prenda de valor), no vamos a poder esperar mucho de él. Creo que ha tocado techo y no conviene que maree tanto la perdiz. Se le fue el primer toro sin justificación ninguna, un toro que podría haberle salvado la carrera. El toro cuarto tuvo varias arrancadas buenas pero no las aprovechó.
¡Aquí paz y allí gloria!
1 comentario:
buena corrida? si no se les ha hecho sangre ni para un análisis. Si no se pican los toros no puede ser una corrida de toros. Como mucho la becerrada de los zapateros.
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