RIGOR ADMINISTRATIVO, CELO Y FALSIFICACIONES

La Malagueta

RIGOR ADMINISTRATIVO, CELO Y FALSIFICACIONES.
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio.

Hace unas fechas publiqué en esta dirección: http://lostorosconagustinhervas.blogspot.com/2009/09/celo-profesional.html, un articulo sobre una nota recibida de parte del doctor Jiménez Limón dando cuenta a modo de queja de una incidencia acaecida en la plaza de toros de Estepona, con el Delegado Gubernativo, Juan Caba.
Para completar dicha información y atendiendo a las explicaciones de la otra parte, es decir de las provenientes de la Comisaría Provincial de Málaga, se justifica sobradamente la intervención del Delegado Gubernativo, señor Caba, en virtud de lo estrictamente profesional, que fue llamar la atención al cuerpo médico de que el burladero de la plaza de Estepona, solo tiene capacidad para cinco personas, que por supuesto deben estar debidamente acreditadas, y no para más. Advertencia que se hizo por parte del delegado en anteriores festejos. El día que nos ocupa, 12 de julio, según las informaciones de la Comisaría, había en el burladero cinco personas, y tres más a cada lado fuera del mismo, con lo que sumaban once personas. Observando el Delegado tal irregularidad se dirigió al cuerpo médico y les instó a quedarse solo los cinco cuya capacidad admitía el habitáculo, y el resto debían pasar a la enfermería, y desde allí seguir viendo el espectáculo, a lo que en un alarde corporativista, todos los médicos se marcharon a la enfermería.
Se entiende que el Delegado, Juan Caba, en este proceder, comprende perfectamente la importancia que tiene el cuerpo médico en una plaza de toros, pero en virtud de su cometido, que con esta explicación aportada, ha quedado claro que no fue exceso de celo profesional, tiene que velar por la seguridad de todas las personas que están en el callejón, y que en evitación de mayores responsabilidades, al ser considerada zona de peligro de una plaza de toros, todas ellas deben ir perfectamente autorizadas en su estancia. Debe saberse que el Delegado Gubernativo tiene la potestad de pedir ese documento acreditativo, por el bien del desarrollo del espectáculo y de la seguridad de todos.

Esta temporada por causa de la desorganización habida en las anteriores, se han extremado las normas que rigen en los callejones de las plazas, cuya competencia, recordamos es exclusiva del Delegado Gubernativo, para evitar incumplimientos reglamentarios. Recordemos que en la feria malagueña de agosto de 2008, en este blog, se publicó una fotografía en la que en un burladero aparecía una cerveza. El reglamento andaluz prohíbe el consumo de alcohol en los callejones, y la empresa justificó, en nota aclaratoria que también se publicó aquí, que la cerveza era sin alcohol.
Esta feria de Málaga el control administrativo en el callejón ha sido el correcto y se le ha pedido el pase a todas las personas y personalidades que a él han concurrido, y personalmente he podido comprobar cómo les eran requeridos los pases al alcalde de Málaga y al Presidente de la Diputación, que sencillamente y sin molestias, es más dando ejemplo como a las autoridades corresponde, los mostraron al delegado de turno.

Tengo noticia, de que un tal Pedro Luis Gómez, ha escrito en un diario local, su extrañeza ante estas actuaciones de los delegados gubernativos, pero en realidad, más que nunca, en esta temporada, ha sido necesario el rigor administrativo pues se han detectado cuatro casos de falsificación de Pases de Callejón, siendo dos de ellos portados por periodistas, lo que en mi parecer tiene doble gravedad.

Por ultimo sería conveniente recordar, y así se pide desde la entidad provincial, que antes de que la parte médica hubiera aireado y puesto en duda la profesionalidad de Juan Caba, mediante escrito de la Sociedad Española de Cirugía Taurina, se hubieran buscado foros de entendimiento, pues el delegado, no hizo nada más que cumplir su obligación, sin acritud, ni exceso de celo. Sólo velando por la seguridad de todos los concurrentes al callejón de la plaza de Estepona.