SEVILLA SIN TOMÁS, CUVILLO, CAYETANO Y PERERA… ¿PASA ALGO?
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Con esta interrogante de desafío me imagino a Canorea y Valencia, sacando pecho, en la rueda de prensa cuando presentaron los carteles de la feria de Sevilla.
Faltan estas figuras, ¡y qué! No es la primera feria en la que no van las figuras. Ellos suelen decir que Sevilla siempre estará ahí y ellos volverán. Si alguno piensa que pasaran los empresarios. ¡Están frescos! Estos empresarios sevillanos son perennes.
Suele preocupar estas ausencias a los maleables, moldeables y consumidores del amarillismo. Les molesta que no se cuente con “figurones” como estos en una feria de postín. Sin embargo el aficionado sabe que la historia empresarial taurina está llena de injusticias, los apoderados, de pulsos y los empresarios de imposibles: imposible pagar lo que José Tomás pide, por mucha Sevilla que sea Sevilla. Imposible atender lo que Perera pide, no se recuerda importancia significativa de este extremeño en La Maestranza, por mucho Madrid habido por medio. Imposible dejar de gestionar los derechos de televisión para Cayetano, si como sería normal, los toreros juntos, no defienden su imagen... y lo de Núñez del Cuvillo, a los empresarios sevillanos, les da risa, no van a entrar por las uvas de las exigencias tomasistas.
Así está la cosa para comenzar una feria esperada y deseada por muchos, en la que hay mejores carteles rematados este año, que el pasado, aunque llegar a la cuadratura del año 2007 se hace casi imposible. No pasa nada por las ausencias. Nunca ha pasado nada. Algunas figuras han faltado varios años y luego han vuelto, triunfando o fracasando, pero en realidad lo que pasa es que el empresariado debe dar la sensación de que manda en su negocio, la figura debe dejar dicho que el que manda es él, y el aficionado a tragar lo que le echen entre otras cosas porque esta plaza es así. El ganadero... el ganadero en la fiesta moderna no cuenta. Es un paria de la tierra que mal vende el ganado que cría en ella... y si además es un ganadero ladrillero rico, mejor para las empresas, pues más barato vende. Ya sé que el farol de que en Sevilla quemarían la plaza por un mal ganado, sólo era un farol... y para molestar. Lo cierto es que como en tantas plazas, el ganado es la asignatura pendiente. Sevilla mira la presentación, otras ni eso, luego lo del juego ya se sabe que es como lo de los melones, pero la esperanza del aficionado es infinita... a ver qué pasa. Por eso comenzamos la feria con la esperanza de los grandes acontecimientos y la ilusión de ver cosas buenas y nuevas, ¡si es posible!
A Tomás habrá que arreglarle una fecha fuera de feria para la próxima temporada. A Cayetano también. Y a Perera… a Perera habrá que darle un nuevo apoderado que defienda bien sus intereses. Lo de Núñez del Cuvillo tiene mérito, si mantiene el cartel… pero ya veremos a ver cuando vuelve a pisar Sevilla.
El cartel de rejones del 19 es redondo, repetido de otras temporadas, pero bien concebido, llena Fermín con su torería, apetece el reencuentro con Hermoso en una etapa de madurez plena, e interesa ver a Diego Ventura si va reposando su toreo en ocasiones esperpéntico. De tres estrellas es el mano a mano entre Morante y El Cid con toros de Victorino, cartel que mantiene un interés superlativo y que de haberse contratado a Tomás hubiera contribuido al incremento de los costes de la feria, y quizás también mermado su protagonismo. Bien confeccionados los carteles de los días 24 y 25. El primero con Ponce, Manzanares y un chaval que por tierras malagueñas nos ha gustado mucho. Daniel Luque. Y el segundo con Juli, Cid y Talavante que después del esperado pinchazo en Madrid tiene esta oportunidad para definirse antes de volver a la capital de España. De no irle bien las cosas en estas dos plazas se vislumbra un futuro bastante negro para Talavante. En Farolillos hay definidos cuatro interesantes carteles que comienzan con el 26: Finito, Morante y Castella. El 27, Rivera Ordóñez, El Juli y Manzanares. El 28, Ponce Morante y el importante puesto de Antonio Nazaré en una oportunidad única para tomar relumbrón; Y finalmente el día 29, Cid, Castella y Luque. Desde esta fecha al final interesan nombres sueltos en carteles de menor entidad, como son el del día 30, Manzanares, y las actuaciones de El Fundi y de Curro Díaz. Se entenderá que los que no se citan son toreros que necesariamente han de rellenar una feria sin que quiera decir ello que no den una buena tarde de toros, como por ejemplo Vilches, Cortés, Bolívar, Salvador Vega o Javier Valverde acartelado nuevamente en la corrida de Miura, ya excesivamente repetitiva quizás por aquello de no cambiar lo que funciona.
El capitulo ganadero tiene su interés en el comienzo de la feria con la novillada de Cuadri. Luego, Conde de la Maza, Palha y Peñajara, amén de Victorino, Fuente Ymbro, El Pilar y por supuesto Miura. Las demás, ya se sabe, típicas ganaderías de procedencia Domecq listas para ser consumidas.
Estamos a las puertas de una nueva feria, de las ferias importantes del calendario mundial. ¡Que Dios reparta suerte porque los carteles ya los repartieron los empresarios!
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