Aunque la fotografía no es muy buena valga pues para explicar que antiguamente se realizaba antes de la corrida lo que se denominaba prueba de caballos, que consistía en verificar la resistencia de los jamelgos que se utilizaban para ese menester simulando la embestida de los toros. Como se verá en esta foto hecha en La Malagueta en 1899 el picador se aproxima a las tablas y con la vara acomete a un pilastrón. Si con la fuerza que el varilarguero le imprimía al envite hacia tambalear o caer al caballo (obsérvese qué tipo de caballito) este era desechado y cambiado por otro. Aunque en realidad ya se sabe que por aquellos entonces se necesitaban muchos equinos.
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