13 abril 2009

GALERIA FOTOGRAFICA de Resurrección, por Pepe Pastor.

El presidente de la Diputación de Málaga con el señor Alonso que no quiso perderse a Perera.
La presidenta Ana María Romero podría dignificar La Malagueta si su trabajo en los corrales fuera de más autoridad o mandara al paro a veterinarios que confunden el trapío de un toro con el del Terrier. ¿O a caso fue ella la que rescató las raspas para quedar políticamente correcta?

Se solicita sanción por tardar en arrastrar el quinto toro y permitir que el público se le echara encima a la presidenta cuando le negaba la segunda oreja a Tomás.
¡Toro inválido!
¡Trapío del sobrero!
¡Otro inválido!
Conde no tuvo opciones con el descastado e inválido sobrero de Laguna Janda.
Tomás le puede a los elementos. ¡Qué gran marino perdió La Armada Invencible!
La suerte de varas en la fiesta moderna
La asignatura pendiente de una plaza de primera. ¡El toro!
Los dioses paran al viento y pegan naturales.
Tomás podría volver a Málaga el día 20 de agosto.
Quieto Perera
El tercer Cuvillo. De lo malo, lo mejor.
Perera le baja la mano. El toro se emplea y el animal se fastidia la mano izquierda. Se ve en la instantánea de Pastor.
La muleta de Perera es un látigo... pero con estos toritos no luce.

No quisieron pagar la reventa.
No hubo nada, pero de entre la nada un suspiro...
... y algún detalle.
Tomás no siempre puede arrimarse.
Ellos a lo suyo y el picador a justificar el sueldo. Hay plazas en las que sobra esta suerte.
¡Torero infanticida!
¡Y se ponía bonito con el piquito...!
¡... o torero con el torito!

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