TROFEO BOCANEGRA

Curro Díaz, foto Pastor.

El pasado 16 de septiembre se reunió en el emblemático marco del Antiguo Cuartel de Sementales el recién creado Consejo Asesor Taurino que junto a su Presidente D. Leocadio Marín y los Concejales D. Manuel Fernández Rascón y Dª Lola Marín, fueron los responsables de dilucidar el otorgamiento del preciado trofeo "Bocanegra", el cual llevaba varios años "desierto". Dicho trofeo recae a la mejor faena en su conjunto de la Feria Taurina de Baeza.
El galardón de la edición 2008 recayó en el matador de toros linarense Francisco Díaz Flores "Curro Díaz" (quien pocos días después consiguiera del mismo modo el trofeo "Manolete" en Linares) por la magistral faena al quinto toro de la tarde, "Apocado", nº 110 nacido en marzo de 2004, colorado, bragado y meano, perteneciente a la ganadería de D. Julio de la Puerta, así como la ejecución de las dos magníficas estocadas realizadas en su actuación la tarde del 17 de agosto.
De otra parte haré mención al toro lidiado en 6º lugar de nombre "Anegado", negro bragado y meano nº 150 nacido en marzo de 2004, que fue indultado por el diestro granadino David Fandila "El Fandi". En conversaciones con la casa ganadera nos informa que tras unos primeros días difíciles, en la actualidad ya se encuentra el toro completamente curado y pastando en el campo.
Este Trofeo fue concedido por unanimidad con la abstención de su propio presidente el Alcalde de Baeza, que mostró su personal satisfacción para que en unos meses pueda organizarse un acto donde se hará entrega del mismo al diestro triunfador. Del mismo modo apostó por dar un nuevo prestigio a la Feria Taurina.
MI OPINION:
Siempre he apostado porque el rigor y la ecuanimidad se sientan hermanadas cada tarde de toros, ya bien sea en el Palco Presidencial, o como en este caso a la hora de valorar faenas taurinas, independientemente de las personas que lo ocupan. De ahí mis constantes observaciones a este respecto cuando la ocasión lo requiere, por este motivo quisiera en primer lugar felicitar públicamente al Consejo Asesor Taurino de Baeza por la acertada decisión, demostrando saber calibrar la hondura y profesionalidad de los toreros y no dejarse llevar por el "triunfalismo", por ello y por varios motivos más que en mi opinión son los siguientes:
1º.- Por haber coincidido con el verdadero aficionado en el más amplio sentido de la palabra, bueno, malo o regular, pero aficionado y eso les honra y les incluye como tales.
2º.- Por no haber tenido en cuenta ese "triunfalismo" al que he hecho referencia y no dejarse llevar por la euforia de un público ávido de triunfo a pesar de ser quienes dicen "mantienen" el espectáculo, esto está muy bien justificado para la taquilla pero nunca para el futuro de una fiesta que se nos muere por momentos y en esta plaza si hablamos sinceramente está empezando a ocurrir.
3º.- Por haber sabido valorar que una gran faena no requiere de más de cinco o seis series, que son las que aguanta un toro, cuando el torero se embragueta y lo recoge adelante y arriba, para sacarlo detrás y abajo, como interpretó el maestro Curro Díaz, a pesar de opiniones que tachan al torero de realizar faenas cortas.
4º.- Por haber demostrado al Palco que las "orejas de pueblo" y que en esta ocasión alguna de ellas se han otorgado, no tienen peso a pesar de los triunfalistas, denostando de este modo una fiesta y una feria taurina a la que hay que darle su importancia, que la tiene, porque cuando se realiza el toreo rectilíneo y a meda altura, el toro aguanta, pero el aficionado no. Y es que alargar las faenas innecesariamente verdaderamente aburren. La mayor parte de los toreros de hoy en día andan con probaturas con sus oponentes el tiempo que antes usaba el matador para cortarles las orejas a sus toros. Y así les luce el pelo, puesto que cuando llega la hora de la verdad, el rival ya no tiene fuelle. Ahí es cuando llega el hastío al graderío, pero así y todo hay presidentes y público que otorgan orejas argumentando el "premio a su entrega". No es menos cierto que no tiene importancia que una faena dure ocho u once minutos, pero si el torero anda enfrascado en un lío importante al toro, de lo contrario "agua de borrajas", por este motivo y a pesar de las dos orejas de Castella a una estocada trasera y atravesada y, el indulto a un toro por "El Fandi" en los corrillos taurinos aparte de Curro Díaz solamente se habla de la faena de "Finito de Córdoba" a su segundo toro ¿Qué es, incrédula la afición baezana?, no señores, no, a esta afición o se le cuida o de lo contrario ya hemos visto los resultados, ha demostrado que al aficionado no se le puede engañar, no llegando a llenar la plaza en su totalidad reuniendo los asistentes a las cuatro tardes de festejos, una pena de la que alguien es en parte responsable.
Es de esperar que este Consejo Asesor Taurino junto a su Presidente, engranaje fundamental en su funcionamiento, al igual que en esta ocasión han demostrado ser aficionados de verdad, trabajen duramente en la recuperación de una feria (y que me perdone a quien pudiera herir, no es mi intención) que ha dejado de ser una de las mejores de la provincia como se ha venido proclamando desde tiempos remotos y; no es comentario personal dada mi edad, viejos aficionados de la ciudad me corroboran lo dicho. De lo escuchado de estos viejos aficionados pudiera sacar la conclusión que la plaza de Baeza la están convirtiendo en una plaza facilona para los toreros, dejando hace mucho tiempo de ser una plaza importante, pasando a ser una plaza más en el calendario de los toreros, sin ninguna importancia especial para ninguno. Toros muy cómodos y orejas muy fáciles, todo con la connivencia como es lógico de PRESIDENCIA Y EQUIPOS VETERINARIOS, máximos responsables de este espectáculo público. En resumidas cuentas, que este Consejo Asesor Taurino trabaje en lo posible para que esto no ocurra y no permita que al buen aficionado baezano lo echen de la plaza y se le prive de la sensibilidad, la nostalgia, la seriedad, el respeto, el aroma, la integridad, la verdad, el sufrir, el llanto, el disgusto, la melancolía, la locura, el miedo, la imaginación, el amor, resumiendo, la pureza. Por Dios, quien es nadie para arrebatar al aficionado todos estos matices, quienes lo consintieren no son dignos de pertenecer a esta tradición donde debería de existir LA VERDAD e INTEGRIDAD DEL TORO, antes que los intereses personales.
Pienso que el Ayuntamiento debería reconsiderar cómo conservar la categoría y el prestigio de este más que centenario e histórico coso y que en próximas Ferias Taurinas vuelva a recuperar ese "halo" con el que contaba y, que entre todos, Empresa, Consejo Asesor y sobre todo Palco Presidencial apuesten y trabajen para conseguirlo, así lo ha dejado entrever su presidente y Alcalde de la ciudad.
P.D. No estaría de más que llegado el llamado "invierno taurino", se convocaran coloquios taurinos por los mencionados anteriormente y se debatiera sobre futuras ferias, cartelerías, etc., para de esta manera tomar el pulso y sentir del aficionado de la ciudad.

Baeza: José Cisneros.