01 septiembre 2008

GPS, ¡EL GRAN HERMANO EN LA GANADERIA!

El Marqués de Domecq
Alvaro Domecq y Díez

GPS, ¡EL GRAN HERMANO EN LA GANADERÍA!
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Por los amigos de la Unión de Profesionales Veterinarios de Plazas de Toros de Andalucía, me entero de un proyecto que aplica las nuevas tecnologías al estudio del toro de lidia, y aunque no me sorprende, si me admira porque todos sabemos lo difícil que es el tratamiento, entendido por manejo, del toro bravo, ¡claro que mucho más se sorprendería el viejo Marqués de Domecq! ¡Si los antiguos ganaderos levantaran la cabeza!
Se trata de aplicar la tecnología del GPS-GPRS que como saben son sistemas de posición y seguimiento de un objeto, persona, o cosa, y ahora animal también, para estudiar su comportamiento y ¡pásmense!, mejorar la producción de este ganado (y cualesquiera otro vacuno), criado en régimen extensivo.
Con este sistema aplicado al toro, van a poder controlar su comportamiento en libertad, se va a estudiar la relación del becerro con la madre, su adaptación al medio, cómo aprovecha los recursos de la dehesa y algo que puede ser muy importante para lo que se refiere al desarrollo de la lidia, se va a poder comprobar la respuesta del animal ante los estímulos externos que le sobrevengan. Esas reacciones primarias que van a ir marcando su personalidad y que entiendo, luego tendrán que ver con la bravura que desarrolle durante su lidia.
La responsable del trabajo es la doctora Marta Hernández Pérez que lo viene realizando desde principios del 2007 y que acabará a principios del año que viene. La colaboración con la Universidad de León y la Universidad de Extremadura, le dan prestigio al estudio.
El toro de lidia es una importante aportación española a la zootecnia mundial y el hecho de que su sistema de explotación favorezca la conservación de ecosistemas, hace más interesante, a nivel científico, este proyecto.
Todos pensábamos que el ganadero más novedoso, en cuanto a experimentos modernistas se refiere, era el difunto Alvaro Domecq, pues fue el primero que inseminó una vaca brava. Luego con el andar de los tiempos vimos que su sobrino, Juan Pedro, se coronó con aquello de los toros artistas. Y la pasada temporada nos desayunábamos una mañana de San Fermín, con las fundas de los pitones, en Fuenteymbro. ¡Es que no vamos a parar de inventar cosas!
Con este asunto del GPS el ganadero va a poder seguir en un monitor todos los periodos de la vida del toro, pues sabrá su posición, chivateada por la señal de diferentes satélites. Se va a enterar del estado temperamental del animal, si está calmado o estresado. De sus desplazamientos. Del tiempo que está pastando y a donde se mueve para buscar comida, lo que le va a permitir tomar decisiones más inmediatas para gestionar la ganadería ahorrando costes en infraestructuras, (cercados) y personal (vaqueros) Sabrá el ganadero del toro que está resfriado, tiene asma o está cojo. Cómo se lleva con la madre o con los hermanos de camada.
En realidad, la cosa es no dejar, (con todo lo bueno que parece tener este estudio científico), al toro en la paz de la dehesa, pues a decir verdad lo que trasluce de esta cosa nueva de la ciencia es introducir en las camadas El Gran Hermano.
Sé que la modernización se impone en todos los ordenes de la vida, y también en la gestión de la ganadería, pero al aficionado lo que le interesa es saber en qué puede afectar todo esto a la bravura del toro que nos venden los ganaderos. Que a parte de que esto le ayude a optimizar la explotación ganadera y mejore el aprovechamiento de los recursos naturales, el manejo de los lotes y un seguimiento y control del ganado a tiempo real vía Internet. Nos sirva a los aficionados para ver en el ruedo a un toro más fiero, más bravo por emocionante, y menos artista.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿También el GPS va a poder detectar las posibles intervenciones de los "barberos"?

Pepe Pastor

Anónimo dijo...

Y digo yo, de esto seguir así, cuando nos queramos dar cuenta, nos pondran un chip en la entrada y asi nos tendrán localizados a los que protestamos, lo que decimos, lo que hablamos con el compañero de asiento y le damos un "quiebro" a la santa.
Mas vale que se dediquen a buscar la bravuera como hacian los antiguos ganaderos, moviendo a los toros por la dehesa, haciendoles subir y bajar, pisar piedra y buscar la sal, etc.
Salud
El Coronel