LOS CEBADAS DE PAMPLONA

Banderilleando a un Cebada. Por Pastor.

LOS CEBADAS DE PAMPLONA
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

No es que asista la razón a los que consideran que el toro grande, ande o no ande, debe estar en Pamplona. Porque no les asiste. Que tenga que ir, bueno. Si hay que ir se va, pero no siempre convencidos. El toro que ha salido esta tarde en la capital navarra no era grande. El sexto sí. El toro grande fuera de tipo que viene a esta plaza unas veces embiste y otras no. Los toros de Cebada que se han lidiado esta tarde han embestido en un tercio, porque en los otros dos no lo han hecho. De seis dos. Cebadita sigue con las tradiciones de los ganaderos antiguos. Enviar a las corridas dos, dos y dos. Dos buenos, dos que se dejen y dos malos, pero aquí se le ha descuajaringado la cosa porque en el sorteo hubieron de echar mano de uno de los sobreros, por mutilación córnea de uno que corrió el encierro, y entonces le han embestido dos, primero y tercero, le han salido dos peligrosos, segundo y sexto, y de los otros dos, el cuarto no se ha dejado, y el quinto ha sido soso. En resumen, que estando en la variedad el gusto, esta corrida ha defraudado, incluso por la presentación. El primero bien presentado, el segundo chico, el tercero y el sexto correctos y el cuarto y quinto feotes.

Dicho esto, aún no ha salido en esta feria el toro que convenza de que los ganaderos envían aquí lo mejor de sus camadas, sin perder la perspectiva de a dónde vienen. Pues ni los dos que han embestido hoy, justifican la picaresca de que el ganado que escogen es lo mas destartalado de las camadas.

Otra parte de la afición, claro que todavía con la cerveza en la mano, piensa, después de la corrida, que hay toreros que no están preparados para estos toros, pues no torean lo suficiente. Esta plaza es así y lo que no se va en llantos se va en suspiros, pues tampoco les falta razón, a los que también con una cerveza en la mano, piensan que todos los toreros tienen derecho a ser contratados. Se ve que la Casa de la Misericordia, conocedora de estas conversaciones de taberna, tira por lo salomónico y confecciona carteles de figuras y de toreros modestos. Hoy tocaba uno de modestos y la teoría del Petete de los toros dice que los modestos lucen (están bien) con los toros malos y se les nota las carencias con los toros buenos. Y el Petete, acierta, ¡claro!

Antonio Barrera ha cortado una oreja y seguramente le valdrá para repetir en la feria del 2010. Sin embargo al toro que le cortó la oreja, le hizo una faena que no pasó de aseada, y toro mejor que el primero no le va a tocar a Barrera en toda la temporada. Con el cuarto se tapó pues se quedaba cortó, buscaba y no se dejó.

El otro toro bueno le tocó a Sergio Aguilar que lo aprovechó a medias. Al principio de la faena no se centró con él y más tarde lo consiguió por naturales, algunos buenos. El sexto que rebañaba le puso difícil el trasteo y aún así tuvo la firmeza de ponerse en el sitio y darle algunos muletazos por la izquierda con decisión y entrega.

Francisco Marco pechó con el peor lote. El segundo complicado y peligroso que le ofreció tres coladas de miedo, nada más empezar. Y el quinto que de soso y descastado no tuvo un muletazo bueno.

¡Aquí paz y allí gloria!

FICHA:
Pamplona. 8 de Julio. 4ª de Feria. Toros de Cebada Gago, desiguales de presentación y juego que mansearon en los primeros tercios y que en la muleta solo primero y tercero se dejaron. Antonio Barrera, oreja tras aviso y silencio. Francisco Marco, silencio y silencio tras aviso. Sergio Aguilar, vuelta al ruedo tras aviso y silencio.