EL PRESIDENTE VENDE A LA UNION

FERIA DE MALAGA 2006 PRIMERA DE ABONO
EL PRESIDENTE VENDE A LA UNION
Transcribo literalmente el articulo de un aficionado asistente a la novillada sin caballos del día 8 de agosto.


Con una gran entrada, que para más quisiera el empresario durante todas las tardes, se lidiaron en la final de I Certamen Internacional de Novilladas sin picadores en clases prácticas, 6 erales de la ganadería de los Millares, flojos y de juego desigual, para los alumnos: Jesús Díaz "El Fani" (escuela Taurina de Badajoz), Carlos Guzmán (Escuela Taurina de Madrid) y Juan Carlos Cabello (Escuela Taurina de Málaga).
La gran entrada registrada, no ha sido exclusivamente por la gratuidad del festejo, ya que en las semifinales no ocurrió así. La embocadura ya del período vacacional junto con la "treta" de engordar el abono por parte de la empresa emitiendo la entrada numerada para el espectáculo de hoy dentro del paquete del abono han sido su causa. Observé a varios espectadores con su entrada reclamar su asiento en el tendido.
Y con tanto público, sin ningún acomodador o personal de la plaza para orientar o ayudar a distribuir al numeroso público congregado, y con los servicios cerrados, al menos en el tendido seis, con lo que había que salir de la plaza a evacuar fluidos y otros menesteres. Sin presencia de cuerpos de seguridad, hasta el final de la corrida cuando observé que una pareja de la policía nacional hablaba con el "yernísimo" en el callejón, y este parecía dar explicaciones, no se porque motivo ¿quizás porque algún espectador había reclamado su localidad ocupada? Lamentable, por parte de la empresa, de la Diputación propietaria del coso y titular de la Escuela Taurina malagueña, y de la Delegación del Gobierno, con responsabilidad en materia de seguridad. Cuando se ofrece un espectáculo público y con el agravante de figurar en los carteles del abono, debe procurarse la comodidad, higiene y seguridad de los espectadores. Y si se emite la entrada para el espectáculo donde figura el tendido, fila y número de asiento, debe respetarse a los abonados y permitir que se ubiquen en su localidad. Una demostración más de la falta de respeto del "Marqués de Fuengirola" y de los políticos con los abonados y el público que acude a los toros. La directiva de la Unión Taurina de Abonados debería tomar cartas en el asunto y denunciar estas irregularidades. Pero dado el rumbo que ha tomado esta asociación no espero de ella que defienda uno de sus fines específicos: "la representación y defensa de los intereses legítimos de los aficionados y especialmente de los que tengan la condición de abonados a la plaza de toros de Málaga".
El festejo en sí transcurrió sin pena ni gloria. De los erales lidiados los mejores fueron los corridos en primer y segundo lugar; el resto renqueantes de extremidades y complicados el quinto y sexto, más que por sus ideas por su flojeza, pues se quedaban a mitad del pase y derrotaban en la muleta.
En lo referente a los novilleros, decir que anduvieron bien con el capote "El Fini" y sobre todo Cabello en su último enemigo, ejecutando una verónica de manos muy bajas y una magnífica media de remate. Todos acusaron falta de conocimiento de las distancias y colocación en mayor o menor medida, algunos pasajes de las faenas de muleta se realizaron fuera de cacho y abusando del pico, y con las deficiencias propias por la falta de práctica con bureles en los alumnos de las escuelas a la hora de ejecutar la suerte suprema. Aunque tampoco podamos decir que se matara mal, teniendo además en cuenta la dificultad que entraña la suerte en erales por su conformación anatómica. Sin embargo, fue el de Badajoz el que realizó la mejor actuación de la tarde en su primero, sin que tampoco pueda decirse que fuera una gran faena, ni mucho menos.
Pero a mi parecer en el cómputo global de la final los que mejor estuvieron fueron por este orden: "El Fini", Juan Carlos Cabello y el madrileño Carlos Guzmán. Además debió tenerse en cuenta sus actuaciones previas en las semifinales. Sin embargo la decisión del jurado fue la siguiente: triunfador Carlos Guzmán, seguido por "El Fini" y por Cabello. Como aficionado hubiera dejado el premio desierto, pues por lo visto en la final, ninguno de los alumnos brilló a gran altura, aunque creo que los más cuajados eran Cabello y "El Fini" y pueden funcionar en la profesión.
En el quinto novillo, que siendo el más complicado lo empeoró el madrileño por su mala colocación, dejándose ver, con lo que sobrevino el percance, reponiéndose de él y sacando rabia de novillero realizó un final de faena de cara a la galería, eso sí, matando de una magnífica estocada. La faena, por el pundonor demostrado y por la estocada era de una oreja. Pero el presidente atendió la petición de la segunda que un público verbenero -¿antesala de lo que nos espera en la Feria?- solicitó con intensidad. Público que sólo valora los pases de pecho, al que desde ahora pasara a denominarse en lugar de obligado de pecho a "obligado de aplauso". Craso error, pues los aficionados esperábamos que la presidencia se mantuviera inflexible y no concediera el segundo apéndice, a todas luces injustificado. Claro que en la actuación final de Cabello, para compensar, le otorgó las dos orejas de forma injustificada y bochornosa.
Al igual que durante la lidia todos deben mantener su sitio en el ruedo y en la plaza el lugar de los que se consideran aficionados está en los tendidos. Si alguien se sube a un palco debe poseer carácter (llámesele buenas dosis de "testiculina") y cualidades tales que le permitan no sucumbir ante un público por mucho que proteste o injurie, y además tener autoridad (difícil si eres un presidente "seglar").
Con esta actuación lamentable en el palco del presidente de la Unión Taurina de Abonados, denuncio con amargura la utilización que este señor ha hecho de esta asociación de solera. ¿Cómo podremos ahora criticar los miembros de la Unión la concesión de trofeos a cualquiera de los presidentes que actuarán en la Malagueta? ¿Cómo solicita la Unión de Abonados a la Junta de Andalucía la declaración de inaptitud para uno de los presidentes de la Malagueta, aduciendo entre otras razones la falta de criterio en la concesión de trofeos? Me temo que la Unión recibió ayer una herida mortal de necesidad. El que escribe sintió vergüenza, rabia y pena. Y lo lamento por mis queridos buenos y veteranos aficionados que componen la mayoría de la Unión. Debo meditar si resulta conveniente y ético por defender la dignidad y verdad de la Fiesta, seguir perteneciendo a esta asociación, vejada y adulterada en sus pilares básicos por quien la preside.
Para rematar la tarde noche, la decisión del jurado fue sorprendente, dejando en tercer lugar al malagueño Cabello, ante la indignación generalizada y justificada de toda la plaza. Los malagueños nos caracterizamos por la falta de vehemencia con nuestras cosas, los nuestro es lo mejor pero para los demás. Y no es por chovinismo sino por equidad el que Cabello hubiera quedado en segundo lugar, tras Jesús Díaz "El Fini". Pero ya saben por eso del que dirán, hay que exigir más a los nuestros, aquí somos muy papistas, bla, bla, bla, Que asco y qué vergüenza, cuando en este jurado había buenos aficionados y, lamentablemente, un miembro de la Unión de Abonados. Tenemos que aprender mucho de nuestros hermanos sevillanos, y saben a lo que me refiero.
Para finalizar: maestro Puyana ya hay bastante verbena en los tendidos para que usted la acreciente haciendo que su magnífica banda irrumpa si más en todos los principios de las faenas de muleta. Aunque nos deleite escuchar su agrupación de excelente músicos, todo tiene su momento durante la lidia, rogándole que cuando en la plaza se vea una faena importante deje usted que sólo se escuche el silencio de la emoción y los olés del corazón. También así podríamos ser de primera. Gracias.

EL QUINTO HOMBRE