Toro de piedra de Paco Rodríguez
FERIA DE SAN ISIDRO 2011. PLAZA DE TOROS DE LAS VENTAS, MADRID. 26 DE MAYO.
Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Toros de El Cortijillo, primero invalido y descastado. Segundo encastado aplaudido al arrastre.Tercero manejable. Cuarto manejable, algunos pitos. Quinto se deja pero no llega al final. Sexto de medias arrancadas. Diego Urdiales, silencio y silencio. Morenito de Aranda, ovación que saluda. Silencio. Miguel Tendero, silencio y silencio.
La corrida de El Cortijillo, otro de los hierros de los Hermanos Lozano, no ha tenido motor, excepto el segundo. Todos han manseado en varas en distinto grado y de presentación no han estado exquisitos. Seguro que todos ellos hubieran lucido en la plaza de Torremolinos dónde las exigencias no hacen afición. De todas maneras también llama la atención que este modesto cartel de hoy fuera llamado a lidiar estos toros que le hubiesen valido a cualquiera de las figuritas que hay hoy en día, por ejemplo al francés Castella, que va diciendo por las esquinas que ayer hizo la faena del siglo.
En realidad los tres toreros de hoy sin estar mal tampoco estuvieron arrebatados y es que posiblemente se contagiaran de la sosería de los toros.
Urdiales, nada pudo hacer con el primero, quizás el menos potable. Anduvo aseado con el manejable cuarto que de haberse lidiado en un pueblo hubiera sido extraordinario.
Morenito de Aranda estuvo mejor en el toreo al natural que en los redondos en el trasteo al segundo que fue el único que verdaderamente embistió. En el quinto estuvo correcto y se puso con verdad, pero le faltó emoción al toro.
Miguel Tendero, no se acopló con el toro tercero y con el sexto voluntarioso.
¡Aquí paz y allí gloria!
FERIA DE SAN ISIDRO 2011. PLAZA DE TOROS DE LAS VENTAS, MADRID. 26 DE MAYO.
Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Toros de El Cortijillo, primero invalido y descastado. Segundo encastado aplaudido al arrastre.Tercero manejable. Cuarto manejable, algunos pitos. Quinto se deja pero no llega al final. Sexto de medias arrancadas. Diego Urdiales, silencio y silencio. Morenito de Aranda, ovación que saluda. Silencio. Miguel Tendero, silencio y silencio.
La corrida de El Cortijillo, otro de los hierros de los Hermanos Lozano, no ha tenido motor, excepto el segundo. Todos han manseado en varas en distinto grado y de presentación no han estado exquisitos. Seguro que todos ellos hubieran lucido en la plaza de Torremolinos dónde las exigencias no hacen afición. De todas maneras también llama la atención que este modesto cartel de hoy fuera llamado a lidiar estos toros que le hubiesen valido a cualquiera de las figuritas que hay hoy en día, por ejemplo al francés Castella, que va diciendo por las esquinas que ayer hizo la faena del siglo.
En realidad los tres toreros de hoy sin estar mal tampoco estuvieron arrebatados y es que posiblemente se contagiaran de la sosería de los toros.
Urdiales, nada pudo hacer con el primero, quizás el menos potable. Anduvo aseado con el manejable cuarto que de haberse lidiado en un pueblo hubiera sido extraordinario.
Morenito de Aranda estuvo mejor en el toreo al natural que en los redondos en el trasteo al segundo que fue el único que verdaderamente embistió. En el quinto estuvo correcto y se puso con verdad, pero le faltó emoción al toro.
Miguel Tendero, no se acopló con el toro tercero y con el sexto voluntarioso.
¡Aquí paz y allí gloria!
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