LA SOMBRA DE EL CID

LA SOMBRA DE EL CID
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Tiene una corrida más y ¡ojalá! que sea esa. Hubiéramos querido que hubiera sido esta, pero no fue. El Cid ya no ve los toros como los veía antes, o como antes nos los hacía ver. Que ha pegado un petardo en Sevilla, a estas horas lo saben hasta en la China Tibetana. Podríamos encontrar disculpas en el primer toro. Descastado, suelto de las suertes, al que Alcalareño no sabe, o no quiere sesgar para banderillear. La presidenta le hace un favor cambiando el tercio con cuatro palos. Lo fijó Manuel en Tablas y le buscó las vueltas pero no consiguió lucimiento. No pasó de voluntarioso. Pero sin disculpas en el cuarto, un toro encastado con mucho interés. Hasta le gritaron ¡fuera! Empezó mal siendo desarmado toreando de capote, y en la muleta, después de fijarlo en los medios no dio una tanda limpia. Acelerado, sin templar. Despegado, sin centrarse y a lo que creo, sin entender las embestidas del toro. Fuera de órbita. ¡Petardo! Con la espada mal, pero esto no es novedad.

Las cosas del toreo. Dije en una ocasión que El Cid no sería figura porque no tenía corazón que es lo que mata a los toros. Me desdije, y lo llame figura cuando en verdad lo parecía. Ahora solo deseo que nos volvamos a encontrar con el mejor Cid que conocimos pues no siendo así, no le vendría mal un descanso después de esta temporada que me imagino tendrá hecha pero a menos dinero.

Sebastián Castella ha salvado el honor en esta feria, y en su último toro que estaba encastado en bravo, a pesar de dolerse en banderillas, y tardear en las embestidas, algunas veces. Todo propicio para que así fuera. Curro Molina saluda en banderillas y le tocan la música y el animal nos hace concebir esperanzas en los dos primeros tercios. Pero hay algo que no funciona bien en la cabeza de Castella. ¿Porqué un quite por chicuelinas? A un toro franco en el capote no se le debe recortar nunca la embestida. Sin embargo el toro a pesar del trato, se rebozó en la media final. Igual que se bebía el vuelo del capote en el recibo por verónicas. Luego en la faena que sí comenzó con el pase cambiado, tardeando, no pasó de correcto y de aseado por el pitón derecho, hasta que le dio el parón, y no tuvo fuelle el francés para continuar por el pitón izquierdo por donde la cosa tenía mérito. Su primero fue el otro descastado de la tarde, con bastante sosería y a veces con la cara alta, solo las tandas primeras, una en la que lo lleva y la otra enganchada. De ahí en adelante nada.

En Sevilla se preguntan a estas horas quien es mejor. Si el padre o el hijo. Sevilla ha visto a los dos toreros. Al padre Sevilla le cortó la coleta por mano de su hijo. Al hijo Sevilla lo adora y eso que solo está empezando. Su primero tardo, protestón y no terminaba el viaje. Había saludado en palos Curro Javier y la cosa apetecía pues el toro tenía interés. Abrió bien la faena, por bajo, genuflexo. Le da una primera tanda por la derecha desengañándolo y al coger la izquierda es desarmado. Repite pitón le pone ganas y con esfuerzo los saca limpios. Y ya no lo vuelve a ver más por el izquierdo. Sigue en redondo pero no hay continuidad, tres y se va el torero. Luego otra tanda, más centrado, con coraje, colocado y templado. La mejor tanda. Le tocan la música y en las dos siguientes el toro pierde las manos en la primera y en la segunda echa la cara arriba. Buenos también los finales, con gusto. En el sexto saludo Trujillo y el toro se dejó mejor, más claro. Y aquí, estética, ritmo, pero falto de mando, por eso cuando se ajustaba más el toro, el torero perdía la compostura y tendía a cruzar las piernas que afeaban el remate de las tandas. Lo prueba por el izquierdo y no lo ve, y cuando vuelve al derecho ya se queda corto aunque el chaval le echa clase y estética al final.

Los toros de El Pilar y Moisés Fraile bien presentados. El tercero parecía un Juan pedro. ¿Estará el ganadero de pruebas entre lo de Aldeanueva y Lisardo? Encastados, cuatro. Descastados los dos primeros. Los encastados por encima de los toreros.

¡Aquí paz y allí gloria!

FICHA:
SEVILLA, Se lidian los Frailes otra vez.
De El Pilar cuatro y dos de Moisés Fraile encaste Lisardo que hicieron primero y tercero. Bien presentados 4º, 5º y 6º aplaudidos al arrastre. El Cid, estocada atravesada que asoma, descabello, (silencio). Metisaca que hace un siete en la paletilla soltando la muleta, estocada perdiendo la muleta, derrame, (pitos). Sebastián Castella, media caída perpendicular, descabello, (silencio). Estocada, (oreja). José María Manzanares, pinchazo perdiendo la muleta, aviso, pinchazo hondo, estocada trasera, (al tercio). Pinchazo sin soltar que se aplaude, estocada, (oreja).Se desmonteraron Curro Javier, Juan José Trujillo y Curro Molina, para quien sonó la música en el quinto.