NO ERAN MODERNOS

Detalle del interior de La Maestranza

Por Erpacomuro

NO ERAN MODERNOS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

No eran precisamente modernos los toros del Conde de la Maza. Es más la corrida ha tenido interés desde el punto de vista del aficionado que no se ha podido aburrir en ningún momento. En verdad cualquier cosa que se les hiciera, bien hecha, tenía su mérito, como cuando los toreros, con más o menos fortuna, les ligaban tandas de muletazos.
En las hechuras, en los pitones, en el trapío se veía que la corrida estaba en Villamarta, y el único más en Núñez, como los sementales que cubren las vacas, era el burraco sexto. Por consiguiente en su juego no han desmerecido de su encaste, aunque como es normal los hubiéramos preferido todos como el quinto toro que ha sido bueno para la faena de muleta. De ahí a la variedad en su juego aunque todos mansearon en los primeros tercios y en la muleta algunos quisieron irse a tablas. Estamos pues ante la variedad de los mansos encastados, a bueno, dicho queda el ejemplo del quinto, o a menos bueno como el tercero. En cuanto a presentación los tres primeros terciados y más cuajados los tres últimos.

Cortó una oreja Oliva Soto por estar firme con el segundo del encierro que se quería ir en la segunda tanda por el pitón derecho y por el izquierdo se negaba. Se la jugó por este pitón el camero y con la derecha después de ir metiéndolo lo ligó y le tocaron la música. La colocación aunque a veces deficiente le sirvió para que pasara el animal. Gustó además por ciertas cositas que tiene de regusto y que a lo peor, en un toro bueno, pudieran convertirse en amaneramientos. Pero está por ver. Pudo haber sido mayor el triunfo si no hubiera pinchado al quinto con el que efectivamente debió haber estado mejor, pero hay que considerar que no es una figura del toreo y que lleva dos segundos en esto. Dicho esto empalmó muletazos por la derecha pero se arredró pronto con la izquierda. Dio vuelta que no discutiré, por no hacerle la contra a los sevillanos que son muy suyos. Pero no puedo dejar pasar criticar a los que ovacionaron al toro en el arrastre por cuanto en varas se fue en el primer encuentro, y al salir del segundo se fue a tablas, y aún cuando cumplió en palos, al final de la faena hizo amago de refugiarse en ellas.

Se presentaba Diego Urdiales en Sevilla y aunque no cayó de pie tampoco salió perjudicado. Dio vuelta por arrancarle al cuarto una tanda por el pitón izquierdo, poniéndose por los dos pitones, y algún muletazo suelto, más. Pero con el primero cometía errores de principiante descubriéndose poniendo la muleta detrás del cuerpo. De resultas se llevó un derrote agrio. Por el pitón izquierdo se quedó sin ver el toro y anduvo torpón y desbordado en general.

Antonio Nazaré debió haber estado mejor con el sexto que tenía un pitón izquierdo bueno y por el que le regaló al principio de la faena un par de embestidas largas, y en el tercero anduvo con valor y con ganas aunque sin resultados ni para mejorar el toro, ni para lucirse el torero.

¡Aquí paz y allí gloria!

FICHA:
Sevilla, cuarta de feria. Toros del Conde de la Maza, desiguales de presentación, algunos sospechosos de pitones como el primero y el sexto. En líneas generales deslucidos pero con un quinto bueno, ovacionado al arrastre injustamente. Diego Urdiales, pinchazo, otro tendido, cinco descabellos, aviso, dos descabellos más, (silencio). Media estocada caída, aviso, (vuelta). Oliva Soto, pinchazo y media trasera de churro, (oreja). Cinco pinchazos con el brazo atrás, y estocada trasera baja (vuelta). Antonio Nazaré, pinchazo, estocada trasera en los costillares, (silencio). Estocada, (silencio).