ADAME CORTA UNA DEVALUADA OREJA.
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Comenzaron las corridas de la Feria de Abril. En realidad hoy comienza taurinamente hablando la feria, y ya se ha cortado una oreja. Una pobre oreja si tenemos en cuenta el escenario y la afición donde, y quien la ha concedido pues seguramente en este ciclo de festejos se cortarán mas, con mas entidad y por numero seguirá siendo una. Y no es lo mismo una oreja por una faena vulgar, que una por una faena importante, como debería haber sido el proyecto de oreja que inició en la faena al quinto Oliva Soto, por cuyo abuelo se guardó un minuto de silencio al terminar el paseíllo.
La futurible oreja a la que nos referimos debería haber estado fundamentada en el oficio y la sabiduría del torero veterano. No es este el caso de Oliva. Un torero de arte, esto es de emociones y de impulsos. Pero con esas armas no se podía vencer la casta del Cayetano Muñoz. Maleó el toro el muchacho por su inexperiencia, por su falta de colocación, por sus descubiertos, y cada error era una experiencia para el burel que terminó por subírsele a las barbas teniendo mucho que torear. Con el segundo de la tarde se esforzó pero no hubo rotundidad. Los aceros mal.
El triunfador del festejo Joselito Adame realizó un trasteo infructuoso al primer toro cuya condición era desclasada aunque se moviera el animal. Y en el del triunfo, enjaretó una faena de menos a mas, con buenos muletazos por la izquierda y alguno recordado por la derecha pero sin que la faena tuviera una enjundia merecedora del trofeo otorgado. El toro el mejor del encierro por la calidad fue aplaudido en el arrastre.
Esaú Fernández vino a Sevilla a comerse el mundo y solo se llevó una ovación que saludó. Se fue a los medios de rodillas a recibir a sus dos toros y puso disposición para concebir mejores logros pero no debía ser su tarde, ni los ángeles le acompañaron, no los de la protección, sino los del duende, pero en verdad de estas tardes hay más que ollas, de las que no siempre se puede comer.
Los toros de Cayetano Muñoz, cuarto y sexto bien presentados, bueno, ovacionado al arrastre el cuarto, sexto moviéndose sin clase. Correctamente presentados tercero y quinto. Se dejó el tercero y el quinto con un interesante viaje. Encastado que se vino abajo. El primero terciado que fue y vino sin clase. Y el segundo avacado que no se entregó.
Saludaron después de poner sus pares: Curro Robles en el sexto. Alcalareño en el quinto. Y también debió saludar Jarocho que los puso con mas clase y menos aspavientos.
¡Aquí paz y allí gloria!
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