Caravaca aprovechando el pitón izquierdo del primer novillo
El murciano revolcado por el encastado tercero
El murciano revolcado por el encastado tercero
Una verónicad del rondeño Luis Ramirez
El cuarto arrancado a la muleta del rondeño
Ramirez al natural
EL CUARTO DE LA TARDE
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio
Salto a la arena de la plaza de toros e Marbella el cuarto de la tarde de la ganadería de Manuel Martín Gavira, El Rodeo, de San Pedro Alcántara, Málaga. Con pies y pidiendo capotes. Era un eral, solo un eral pero con hechuras de torito, y le dio por embestir. El numero 16, de buena reata decía el ganadero y a fe que Manolo "Gavirita" sabe lo que tiene en su casa. Se deslizaba sin aspavientos por el pitón derecho y en los vuelos del capote de Luis Ramirez se bebía los vientos por el izquierdo. Otro novillo con casta. De esa casta que se ha perdido en lo que llevamos visto de ferias. ¡Qué alegría! verlo atemperado en los galopes, noble en las embestidas a la franela, sin cansarse y cansando que es condición gráfica para apreciar la casta. Un eral que era un torito para dar templanza también a los nervios del ganadero. El novillero de Ronda con unas maneras extraordinarias con el capote, y poco toreado, como es natural en este tipo de novilladas le pegó los pases sin embargo debe cuidar las distancia, la colocación y el temple, bases fundamentales del buen toreo. Mató de un pinchazo sin soltar, aviso, media y una estocada, cortando una oreja muy benévola. Al segundo de la tarde Luis Ramirez le tapó los defectos. De salida el novillo se metía por el pitón derecho y por el izquierdo se desplazaba bien en los vuelos del capote. En banderillas Arijo sale prendido, pues el novillo arreó para chiqueros, por fortuna sin consecuencias. En la muleta el novillo cambió, por el derecho fue de menos a más, y por el izquierdo de más a menos pero por ningún pitón rompió hacia delante. El de Ronda estuvo firme y decidido con él. Mató de un pinchazo precipitándose, una perpendicular, aviso, otro pinchazo y una tendida. Saludó la ovación.
El murciano Alejandro Caravaca pechó con un lote complicado, el primero de la tarde porque no embistió por derecho, doliéndose en palos, descompuesto en el capote y metiéndose por el pitón derecho, por el izquierdo se dejó sin humillar. El chaval naturalmente estuvo desconfiado pero pundonoroso, y antes de entrar a matar recibió un aviso, luego pinchazo, estocada y otro aviso. Saludó la ovación.
El tercero de la tarde fue otro gran novillo pero este en encastado. Se dolió en banderillas pero rompió bien por ambos pitones en el capote. Tuvo pies, la boca cerrada en todo momento y pidiendo gente en los medios. También era natural que se le notaran las carencias al muchacho y consecuentemente recibió varios revolcones lesionándole la mano izquierda. Mató de una tendida y un pinchazo recibiendo palmitas de consolación.
El tercero de la tarde fue otro gran novillo pero este en encastado. Se dolió en banderillas pero rompió bien por ambos pitones en el capote. Tuvo pies, la boca cerrada en todo momento y pidiendo gente en los medios. También era natural que se le notaran las carencias al muchacho y consecuentemente recibió varios revolcones lesionándole la mano izquierda. Mató de una tendida y un pinchazo recibiendo palmitas de consolación.
Para el domingo que viene se anuncia un cartel con muchísimo interés, otra novillada sin picadores Juan Cortés y la presentación de Carlos Corbacho, hijo del matador de toros y empresario taurino. Los novillos serán de su propia ganadería.
¡Aquí paz y allí gloria!
2 comentarios:
Don Agustín como buen aficionado que soy a este mundo, el de la tauromaquia todo depende del cristal con que se mire, yo también vi la novillada del Rodeo pero creo que fueron desiguales de presentación y complicados de comportamiento y el cuarto tampoco era novillo de vacas como titula usted su crónica, ya que se tapaba por su humillación y recorrido pero con genio y sin entregarse. Respecto de los novillos restantes, es cierto que nunca abrieron la boca, ¿Pero es que acaso se entregaron?, es decir, nunca humillaron, andarines, reservones, midiendo las distancias, mansearon en el tercio de banderilas, sin fijeza ni fuerza alguna es mas el cuarto arrastraba los cuartos traseros. En cuanto a los novilleros estuvieron dignos y con ganas, con sus fallos pero con entusiasmo intentaron tapar sus defectos.
Como ve usted, mi crítica no es tan constructiva como la suya pero es lo que percibí bajo mi punto de vista, el de un sufrido aficionado.
¡Aquí paz y allí gloria!
Querido y sufrido anonimo, me gustaria que interviniera mañana en el programa de Onda Cero donde he invitado al ganadero y podríamos hablar sobre este asunto, para ello necesito un numero de telefono o que se pase por los estudios de Marbella, usted me dice. Gracias!!
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