Estocada ultima que recetó en La Malagueta
Fotografias: Viajes Saldumar. Marbella
Les voy a decir una cosa, Finito de Córdoba ha sido una de las mayores esperanzas de los aficionados al buen toreo. Su ortodoxia era de las más perfectas. Su concepción del toreo de los más puros. Sin embargo pocas tardes lo vimos en su esencia. De novillero con caballos fletó autobuses. Marbella lo vio y nos embobó. Toreaba bien el zagal. Pero una cornada en La Malagueta se llevó al buen torero y apareció el hombre, con sus miedos, sus alivios y sus desperfectos. Jamás de matador toreo como de novillero. Flojo de ánimo. Con poco espíritu de triunfador. Conformista y quizás demasiado despechado. Engañado por sí mismo y por aduladores, Finito se ha perdido. Su figura se ha olvidado. No suena. Está, pero no suena. Tiene la moneda, ahora hace falta que algún día quiera cambiarla.
1 comentario:
Finito de Córdoba, como todos los toreros han tenido sus cogidas y se recuperan de ellas, precisamente Finito sufrio en la Malagueta en el año 1989 una grave cornada toreando una novillada de Cebada Gago que la asumio como una cosa natural dentro de la profesion.
Es cierto que todos los aficionados estábamos muy esperanzados y confiados en que se mantendría cierto tiempo en los puestos de arriba del escalafón, pero de la situación actual por la que está atravesando el único culpable se llama Finito de Córdoba, y esto siendo realistas fue una época que paso y que no volverá.
Y de verdad que me gustaría equivocarme.
Saludos cordiales
Lázaro Iborra
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