16 octubre 2011

ADIOS A RAMÓN OSPINA

Foto El Mundo

Adiós por la puerta grande
Autor: Redacción EL MUNDO de Medellin
16 de Octubre de 2011

Ramón Ospina concluyó su carrera en los micrófonos el 24 de febrero de 2007 con la narración de la última corrida de la 16ª. Feria de La Macarena, donde alternaron César Rincón, Matías Tejela y Andrés de los Ríos con toros de Zalduendo.
“El insobornable” Ramón Ospina, al verse padre de dos hijas, colgó su traje de luces el 20 de julio de 1952 en la Plaza de Toros de Titiribí-Antioquia.

El connotado hombre de radio y reconocido nacional e internacionalmente como uno de los más acatados comentaristas taurinos, Ramón Ospina Marulanda, falleció ayer a las 10:45 de la mañana en la clínica Las Vegas, de Medellín.

Nacido el 1 de abril de 1928 en el municipio antioqueño de Santa Bárbara, “El insobornable”, como era conocido en el ambiente de los toros, dejó de existir por un paro respiratorio, informó a EL MUNDO su hijo, el periodista Carlos Alberto Ospina Macías.

Don Ramón estuvo vinculado a la Cadena Caracol durante 54 años de los 61 de vida profesional. Fue colaborador taurino de EL MUNDO.

Estuvo casado durante 61 años con la señora Eufemia Macías, de cuya unión nacieron ocho hijos: Miriam, María Eugenia, Yolanda, Marta Lucía, Luz Marina, Juan Ramón, Carlos Alberto y Sergio Iván.

En su juventud se dedicó a la publicidad y luego llegó a la radio como narrador y comentarista taurino durante 61 años.

En su prolongado paso por Caracol realizó programas como “El relojito campesino”, y “Tendido Siete”, dedicado al mundo de los toros y en el cual estuvo acompañado de figuras del comentario taurino como Guillermo Rodríguez Muñoz y el español Manolo Molés.

Fuentes familiares recordaron que don Ramón siempre pregonaba los tres grandes amores de su vida: su familia, Manizales y Caracol.

Es el único colombiano ganador del prestigioso Premio Mundial al Periodismo Taurino Mariano Zumel.

La misa exequial será hoy a las 10 de la mañana en Campos de Paz y la semana próxima la familia decidirá la fecha para trasladar sus cenizas a la Catedral de Manizales, como fue la última voluntad de don Ramón.
Paz y amor

El jueves 6 de octubre, don Ramón pudo pronunciar algunas palabras después de nueve días de hacerlo por señas, indicó a EL MUNDO su hijo Carlos Alberto.

Algunos son apartes del texto remitido: "Siempre le pedí a Dios que cuando llegara este momento de mi muerte, estuviera rodeado de toda mi familia… Les pido que cuiden, comprendan, quieran mucho y no dejen sola a su mamá… Ella los necesita ahora más que nunca… Me siento muy orgulloso y satisfecho de la familia que logramos conformar".
"Los invito, hijos míos, a superar mi obra, a mantenerse unidos en la adversidad y en este momento de mi partida. Los amo muchísimo".

"Les pido perdón a aquellas personas que ofendí y herí con mis palabras o actos. De corazón nunca quise hacer daño a nadie. También hagan saber a quienes me persiguieron o fueron mis detractores y procuraron hacerme daño, que a todos ellos ya los perdoné hace mucho tiempo. Sólo hay paz y amor en mi corazón".

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