01 septiembre 2009

JOSÉ TOMÁS Y CURRO DÍAZ TRIUNFAN

Curro Díaz con la derecha
El torero de Linares, en un ayudado

FERIA DE LINARES

TRIUNFO DE JOSE TOMAS Y CURRO DIAZ
FINITO PASA UN QUINARIO
Por José Cisneros

2ª Corrida Feria de San Agustín de Linares

Lleno hasta en el tendido de los sastres adyacentes a la plaza de Linares en tarde de éxito y fracaso donde se rozó la tragedia.

Ficha del festejo:

Se lidiaron toros de “El Pilar”, pobres de presentación, terciados y anovillados. Se lidió un sobrero en segundo lugar de la Reina.
Finito de Córdoba, silencio y bronca tras tres avisos, al que mató por cogida de Curro, pitos.
José Tomás, dos orejas y dos orejas.
Curro Díaz, dos orejas en el único que pudo matar.

Juan Serrano “Finito de Córdoba”.- Finito pasó un quinario esta tarde en Linares, no fue su tarde, anduvo toda ella desconfiado. Su primero era un toro justo de presentación y renqueante de los cuartos traseros, muy protestado por el público, un verdadero inválido.
Así y todo le vimos unas buenas verónicas y algunos muletazos a media altura con su sello personal. Mata de estocada defectuosa echándose el toro. Pitada generalizada en los tendidos a este primer toro de El Pilar.
El cuarto, un toro basto y sin hechuras, corretón, sin fijeza y peligroso que toma el capote al paso nada pudo hacer Finito con el capote. En la muleta se mostró sin clase y pegando tornillazos saliendo distraído y con la cara alta del encuentro. Finito se descompuso ante un toro que tras arrearle media estocada en los bajos se puso difícil y huidizo a la hora de descabellar, tres avisos y toro al corral.
El que mató en sexto lugar por cogida de Curro Díaz sembró el pánico en el ruedo y bajo mi punto de vista no era para tanto, había que darle su lidia a la que los toreros de hoy no están acostumbrados. En el caballo se masacró a este animal en la puerta de toriles, a la salida del caballo si no suelta Finito el capote hubiera sido atropellado, en otro arranque hizo que Juan Montiel acabara por el ceniciento ruedo linarense y José Tomás se hace cargo de la lidia de este toro hasta que Finito toma la muleta y le hace una faena de alivio incluyendo fases en las que fue aplaudido por el pitón derecho, ya que aunque evidenció su peligro por el izquierdo, por el derecho el toro denotó que de haberle bajado la muleta y tirado de él aguantándolo como por momentos hizo Finito se le podía haber sacado más juego, pero Juan Serrano se descompuso y la tarde ya estaba sentenciada. Mata de media estocada.

José Tomás.- Flojo el segundo bis de la Reina por devolución del titular al partirse un pitón cuando perseguía tras un par al banderillero. Echa las manos por delante en el capote y sale de najas del caballo. En cambio en la muleta resulta noble y repetidor. Faena por ambos pitones basada en el poder y la técnica que habitualmente demuestra este torero, mejor por el pitón derecho donde lleva al toro medido y muy templado, tanda de muletazos de adorno con mucha variedad para ir por el estoque y manoletinas ajustadas para entrar a matar, estocada fulminante. Dos orejas.
El quinto un toro justito de presentación aunque se tapaba por tener más cara, huye de los capotes y se va al caballo que hace puerta, sale suelto y sigue sin querer capa. Quite de Tomás ajustadísimo a pies juntos. En la faena de muleta resulta noble y en este toro es donde vemos al José Tomás triunfador. José Tomás ha quitado los vicios al toro y le realiza una faena de quietud en el centro del ruedo donde las distancias son iguales para todo el mundo que presencia la faena. Las tandas las realiza dando tiempo y distancia al toro ya que en las cercanías protesta, cuatro tandas de naturales con remates de pecho sacándose al toro por la hombrera contraria excelentes y dos naturales ligados con trincherilla ponen fin a una gran labor de este torero, la estocada defectuosa pero fulminante. Dos orejas.

Curro Díaz.- En el tercero de la tarde es cogido sin consecuencias al recibirlo de capote, un toro al que había que estar muy firme delante de él. Curro así lo entiende y torea para él en una faena basada por el pitón derecho. Todo ligado, todo templado, todo medido y con una caligrafía difícil de igualar y rematada con unos pases de pecho y trincherillas con un sabor que solo Curro sabe darle, público entregado ante una faena antológica y puedo asegurarles que no es paisanaje. Gran estocada para culminar una lección de cátedra premiada con las dos orejas ganadas a ley. Faena difícil de olvidar.
El sexto toro de la tarde propina una espeluznante cogida a Curro cuando lo recibía de capote. Curro es conducido a la enfermería presagiando la cornada, perdió el conocimiento volviendo en sí en la enfermería. Las primeras noticias son alentadoras ya que los médicos descartan la cornada. Su apoderado declara que de salir todo bien una vez sea diagnosticado en el Hospital de Linares donde es trasladado para examen radiológico, es el candidato para sustituir a Morante de la Puebla para la corrida de hoy, siendo ofrecida por la empresa tras la monumental faena al tercero de la tarde.

Parte médico: El matador de toros Curro Díaz presenta traumatismo torácico, craneal y nasal, con pérdida de conocimiento que recobra en la enfermería. Es trasladado al Hospital de Linares para estudio radiológico. Firmado por el doctor Rafael Torres.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Apreciable Sr. Hervás, como de costumbre, magníficas observaciones de su parte. Aquí y ahora sólo quiero constatar que concuerdo con lo lamentable que es ver "lo espectacular" de un matador poniendo banderillas de gimnasia, ¿u olímpicas? El Fandi se luce ante gente que aplaude saltos circenses y carreras marcha atrás. ¡Vaya contraste de imagen con un memorable par de Joselito, Gaona, Esplá, Balderas, (etc.)! Gracias y enhorabuena por hacer destacar dicha diferencia entre el artificial arte atlético de aquél y el hondo mérito taurino de éstos.

Anónimo dijo...

Añadiendo al comentario anterior respecto a las banderillas voladoras de un Fandi. En efecto, queda la imperiosa necesidad de recordar a otros verdaderos banderilleros como el llorado Manolo Montoliú --pureza, profesionalismo y humildad. Hay tantos otros que desde antaño, e independiente del pseudo factor del 'toro moderno', dejaron en la historia o dibujan en el presente, hermosos pares de rehiletes. ¿No me haría Vd., Sr. Hervás, favor de mencionar algunos más de estos grandes banderilleros? Ex novilleros, ex matadores, o tal vez finos hombres de plata, cumpliendo bien su labor, sin el absurdo afán de imponer nueva marca en los saltos de altura. ¡Que los matadores saltarines de hoy día presten mejor atención! Y puesto que no les es ningún secreto a los jefes de cuadrilla, al menos sería un aliciente ver una mayor dedicación al colocar los palos como mandan los cánones. No como varios diestros actuales lo hacen (Fandi, Ferrera, et al). Que respeten dicha suerte absteniéndose de ejecutarla. Mejor es ver a los banderilleros hacerlo pues tal es su oficio, tal es su orgullo; y aún hay aficionados que aplauden un digno par hasta que el fiel de plata se desmontera en mutuo agradecimiento. Moraleja: banderillas verdaderas sí; banderillas voladoras no.