29 mayo 2009

EL ANCIANO Y EL NINJA

Hoy no hubo Malagueños en Las Ventas

EL ANCIANO Y EL NINJA
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Hay leyendas que sostiene Las Ventas incomprensiblemente y con el paso de los años se convierten en papel mojado. Una de ellas la del anciano Frascuelo. Otra la de los toros de Adolfo Martín, y hoy además, como si de un Ruiz Miguel se tratara, se escribe la primera página de la del murciano Rafaelillo. Empecemos pues a desmontar esta última, antes de que los chorros de tinta rellenen más páginas.

Rafaelillo el Ninja que así le llama Gorruti, con más propiedad, "el tortuga Ninja" tiene la cabeza llena de ideas que no tiene ordenadas. Sabe que lo ponen en las ferias y en las corridas duras y es complaciente con su destino, pues no alcanza a ver otro. Mejor verbo: a haber otro destino pues no se lo crea, ni él, ni su propio entorno. El Ninja es un torero valiente de trágalas y resoplido, pero no de valor natural. Cada vez que tiene que dar un muletazo toma aire. Y además no tiene pensamientos claros, debido al bullir de ideas desordenadas, y le da por tirar a dos toros a tierra para que los devuelvan. El titular de Adolfo, y el sobrero de Sepúlveda. A su favor en la tarde tiene el segundo toro que no valía un pimiento y aunque hizo el aman de ponerse, no consiguió arreglar nada. Eso sí, Rafaelillo se pone, pero no se coloca bien. Es para que veamos que está dispuesto y que con aquello no se puede hacer nada. Como por ejemplo cuando le salió el sobrero de Araúz que no sabia estar delante de un toro sin fuerzas, sin recorrido, chochón y que tiraba de nacimiento la cara abajo.

Otro mito. Adolfo Martín. Por simpatía se ha ganado el aplauso fácil como ganadero. Por simpatía con lo de su primo, y quizás porque los que lo conocen, dicen que es buena persona. Los tiene buenos, no voy a decir que no. Los tiene premiados, no voy a decir que no. Pero no los tiene tan bravos como él quiere venderlos. Y tampoco los tiene grandes. Aquí no admito la justificación del trapío de lo de Saltillo y Santacoloma, que tiramos de archivo y los saco con caja en el mismísimo Madrid. La corrida muy terciada y algunos anovillados como los dos primeros. Y de casta, muy baja. A mi me sigue gustando decir lo de la casta pues es lo que a estos toros bravos los diferencia de entre otros de la raza bobina. Mansitos sin emplearse en los petos y tampoco en las franelas aunque el tercero tuvo un buen pitón derecho, el cuarto fue el toro de la corrida y el sexto aunque inválido se dejó. Esa es otra. La corrida floja e inválida.

Otro mito: Frascuelo. Con todos mis respetos a las canas y a la historia de los hombres que tienen partidos los muslos a cornadas. Pero ponerse delante de un toro para vivir un sin vivir y pasar la angustia al tendido, no es. La edad es la edad y la razón no es más que una. Ya no va a ganar ningún cortijo con una corrida en Las Ventas, porque para ello. El lo sabe mejor que nadie, hay que volver a dejarse partir las femorales. A merced de los toros, sin facultades, sin reflejos y físicamente mermado. Impotente no pudo hacer el esfuerzo en el primero, y en el cuarto quedaron al descubierto todas sus carencias. Gorruti dice que "pa esto mejor no venir"

El salmantino Valverde ha perdido cartel en esta feria. En esta corrida se le han ido dos posibilidades, no digamos de triunfo, pero sí de mantener su cartel, y no ha sido así. En el tercero muy al hilo del pitón derecho que era el potable e incapaz de centrarse con el toro, se le vio muy espeso. Y en el último de la tarde, si bien ya se sabe que si no hay toro nada tiene importancia, el animal se dejó aunque con poquita fuerza… y Valverde estuvo sin estar en él.

Aranda saludó después de poner un par de banderillas caído al cuarto toro, pero de ejecución fue bueno.

¡Aquí paz y allí gloría!

FICHA:
Las Ventas. Penúltima de feria.Toros de Adolfo Martín, terciados y flojos, manejables, tercero, cuarto y sexto. En quinto lugar salió un sobrero de Araúz de Robles, después de otro de Sepúlveda, que resultó chochón y justo de fuerza. Frascuelo, pinchazo sin soltar dejándose el brazo atrás, otro pinchazo yéndose, uno hondo caído y dos descabellos, silencio. Pinchazo, media tendida echándose fuera y descabellos, pitos. Rafaelillo, pinchazo, estocada contraria con derrame, silencio. Pinchazo sin soltar, pinchazo y estocada, silencio. Javier Valverde, pinchazo y estocada buena, silencio. Bajonazo, silencio.

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