07 agosto 2008

SIN OREJAS

PRIMERA CLASE PRACTICA. MALAGA 06 DE AGOSTO 2008

Erales de ANTONIO TRUJILLO, que sustituian a los anuciados de Espartaco, desiguales de presentación, algunos mansitos, 3º, 4º y 5º, y otros débiles, pero en general manejables. Primero pitado. FELIPE CHAMACO de Sevilla, saludos desde el tercio. JONATHAN LOPEZ de Ronda, vuelta al ruedo. JUAN SARRIÓN de Castellón, saluda la ovación. JOSE MARIA CORTÉS de Málaga, ovación con saludos. ANTONIO DAVID de Écija, vuelta por su cuenta. JUAN LEAL “JUANITO”, vuelta por su cuenta.

SIN OREJAS
Por Agustín Hervás
Onda Cero Radio

Los novilleros se fueron de La Malagueta en su primera clase practica sin cortar una oreja. El caso es que los novillos las tenían porque yo las vi, pero luego no fueron capaces de cortarselas. Algunos paisanos las pidieron, pero lo hicieron de forma pueblerina y el presidente oficiante el señor Del Olmo vio conveniente no darlas pues como clase, los alumnos deben aprender que todo no van a ser orejas en la vida. Claro que los alumnos deberían aprender más cosas, ahora que están en la fase de aprender. Por ejemplo a hacer el paseíllo más reunidos y menos desmadejados. Por ejemplo a matar, a descabellar y en algunos casos a elegir bien las cuadrillas para que no petardeen los banderillos delante de los alumnos. Las suertes son la suertes y por consiguietne puede pasar de todo. Revolcones y cogidas que es lo normal en los novilleros. De cualquier manera la lección más clara de esta primera clase es que algo falla en el sistema de aprendizaje de los muchachos aspirantes, y a mi me da que lo que falla son los profesores, que queriendolo hacer bien no lo consiguen debido a que ellos tampoco lo hicieron bien, porque no lo aprendieron bien. Pongamos por caso las colocaciones, los trucos, las ratonerias en detrimento de enfrontilarse con el medio pecho dado. Cruzarse. Vaciarlo atrás. En fín. No obstante se debe insistir que son novilleros y son clases practicas, y en consecuencia el juicio sobre lo visto debe ser acorde a lo que es.
No se entiende que en esta clase se hayan picado todos los novillos, si no todos lo necesitaban. El primero pongo por caso. Muy débil, extremadame débil, no debió serlo y por lo tanto el muchacho de Sevilla, Felipe Chamaco, pagó el pato. Lo mejor que hizo fue pasaportarlo de pinchazo hondo y una trasera.
El rondeño Jonathan López tuvo la voluntad de sacarse el novillo recibido de capote a los medios y despues de banderillas lo brinda al cielo en memoria de su abuela materna recientemente fallecida por lo cual el chaval lucía brazalete negro. Con soltura por el pitón derecho pero despegado y toreando para afuera y con la izquierda dió los dos mejores naturales de la tarde, luego al volver al pitón derecho, más centrado. En realidad lo del rondeño fue una cuestión de confianza. Cuando se confió más sacó mejor partido a la embestida de la flojita res. Un metisaca, un bajonazo y una buena.
El castellonense Juan Sarrión enjaretó buenos muletazos con firmeza y voluntad y los robó en los mismisimos toriles a un novillo aquerenciado. Tuvo esa disposición de novillero y esa clarividencia que da la razón al alumno que sabe ver y escuchar a los maestros que en otro tiempo y otras plazas hicieron lo que él ha repetido, con tesón.
Tambien manseó el novillo del malagueño José María Cortés que me dicen que es de Vélez Málaga. Vega, el hermano de Mari Paz, que estaba en el tendido presenciando la clase, puso buenos pares de banderillas. Luego con maneras y puesta en escena firmó dos pases de pecho de bella factura y dejando ver su concepto del torero, que es de trazo largo llevando al novillo hasta el final de lo que da de sí el brazo que maneja la muleta, además tiene sentido del ritmo. Interesa verlo de nuevo si bien hay que afinar la punteria con los aceros.
El chaval de Ecija, Antonio David, puso más voluntad que oficio y el de Arles, Juanito, puso una constante voluntad en hacer las cosas bien aunque no siempre le salieron; En las lopecinas, en los pases cambiados, con el novillo más pegajoso.
¡Aquí paz y allí gloria!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Usted es un santo Sr. Hervás. Yo estuve en la charlotada de ayer y vi menos cosas de las que dice. A los que aprenden, hay que enseñarlos y estos chicos estan muy mal enseñados. Los profesores deben ser unos tarugos. Han aprendido los chicos todo lo malo del toreo. Todos los trucos, las marrullerías de las figuritas.
D. Agustin, un payaso de estos, cuando mete el pico y torea para afuera y no se cruza, es para mi una mierda con perdón.
Viendo lo de ayer, se explica que no haya figuras de verdad, que se paguen 500 euros por ver a uno que hace 30 años hubiera sido uno más de las 20 fuguras que había.
Es que hasta los banderilleros fueron pésimos menos Vega. No hay espiritu de novilleros, no tenían pundonor, no se comian a bocados a los novillos. Todos en plan figuritas de porcelana.
Cuando se ha vivido la segunda época de oro del toreo, esto me suena a fraude, timo y estafa.